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— pues no va a poder venir mamá, ayer me llamo y me lo dijo.— le contaba a mi madre mientras tomábamos el té en la terraza, tenía a mis niños alado mío en su carreola.

— ay hija. Pues deberías hacer algo, no puede dejarte con toda la responsabilidad de los niños a ti sola.— decía mi madre disgustada. Y tenía algo de razón.

— ya lose mamá, pero que puedo hacer yo ? Él dice que es su trabajo y no puede hacer nada al respecto.— dije yo alzando mis hombros.

— siempre se puede hacer algo hija, que a él no le importe es otra cosa .— dijo mi madre y después tomó de su té.

— ay mamá pues él dice que si le importamos y nose que tanta cosa, pero la verdad lo que dice no concuerda con lo que hace y nose tal vez por eso siento falsas sus palabras .— decía algo confundida.

— pues claro hija, cuando alguien dice una cosa y hace otra las palabras suenan falsas, es muy fácil hablar después de todo. — dijo mi madre asentí y después bebí de mi té, para después mirar a mis bebécitos dormidos ahh eran tan hermosos los amo tanto.

— de lo que si estoy segura mamá, es que amo a mis hijos y no me importa lo que pase con hassan mis hijos son mis hijos y siempre los amaré y los tendré conmigo. — dije quitando la vista de mis bebes y llevándola a mi madre.

— pues ojito con eso eh hija, porque si las cosas se salen de control entre tú y hassan, tus hijos estarían en juego y en un juego o se gana o se pierde corazón .— decía mi madre mirándome, así que una vez más lleve mi vista a mis bebés.

— no mamá yo a mis hijos no los voy a perder nunca, y eso te lo juro.— decía segura de mis palabras sin quitar la vista de mis hijos.

— y que me dices del chico ?.— pregunto mi madre y la mire.

— hassan ?.— pregunte y ella asintió.— ay mamá nose, nos descuida mucho y pues yo también necesito atención de él, sus hijos necesitan reconocer su voz, nose nose que pase con ese chico .— dije meneando mi cabeza, esque era la verdad hassan era todo un tema, y que en estos momentos hace que me duela la cabeza y por ende no lo quiero tocar.

— ay hija pues piensa bien lo qué haces, piensa en si realmente vale la pena que estes aquí encerrada cuidando a tus hijos, sin poder disfrutar de la vida, cuando él se la pasa viajando y no te quiero meter ideas a la cabeza pero hasta puede andar de volado con mujeres haya donde anda .— dijo mi madre y yo lo sabía ya, pero igual es bueno que alguien me lo diga.

— si ma, yo sé, pero ahora sí que no puedo hacer nada desde acá yo .

— pues si mi amor, pero si él elige ese lado, de no tomarse enserio la gran responsabilidad que tiene ya como padre de familia, si decide seguir gozándose la vida esta bien, pueden llegar a un acuerdo, pero que en ese acuerdo venga donde tú también puedas hacer tu vida y gozarla y no estar aquí encerrada cuidando a sus hijos.— dijo mi madre mirándome, asentí. La mire .

— si .— dije mirándola .— tienes razón mami.— dije con una leve sonrisa que ella me devolvió .— veré a qué acuerdo llegamos o que hacemos respecto a nuestra relación .— dije y mi madre asintió.

— esta bien hija .

— ay tengo sueño .— dije pasando mis manos por mi cara, estaba muy cansada.— ayer Fernanda no dejo de llorar durante toda la noche y cuando se calmaba y la lograba dormir enzo comenzaba a llorar y así sucesivamente, yo estaba cansadísima mamá.— dije mirándo a mi madre, ella me miró con cierta pena en su mirada. Pero el brillo en sus ojos seguía ahí .

— ay hija nadie dijo que esto sería fácil, no es fácil ser madre y mucho menos de dos criaturas pero tienes que ser fuerte recuerda que todo es temporal y en algún momentos tus hijos ya se irán a la cama solos.— decía mi madre .— igual si te sientes muy cansada llámame y yo vengo a apoyarte cuando lo ocupes.

— gracias mamá de verdad, por todo, eres la mejor .— dije y le di un pequeño abrazo.— mañana viene mi suegra .— dije yo.— ella ama ver a los niños pero siento que es demasiado cargosa con ellos.

— ayy hija recuerda que ellos también pueden recibir amor y no solo el tuyo.

— Sisi lo se, pero nose aveces siento que es demasiado igual y son cosas mías.— dije sacudiendo un poco mi cabeza para dejar de pensar en eso.

— bueno amor, yo me tengo que ir .— dijo mi madre levantándose me levante junto con ella.— me encanto venir a verte hija. Te amo y nos vemos pronto . — dijo mi madre con una sonrisa que yo le devolví.

— gracias mami yo también te amo.— dije dándole un abrazo.
Después de unos segundos nos separamos, mi madre se despidió de los niños y del sus salió de la casa, me vino bien verla la verdad, saqué cosas que necesita y ella me apoyó y me escuchó. Junto con los niños me metí a la casa y comencé a cocinar con ellos en su carriola en la sala que no estaba muy lejos de la cocina de aquí podía verlos, además estaban dormidos así que no me preocupo tanto. Termine de hacer la comida y me acerqué a ellos, no habían hecho ningún ruido o berrinche mientras estaba concinando y eso me pareció un tanto extraño. Al llegar delante de ellos vi que fer estaba profundamente dormida, pero enzo tenía los ojos abiertos con su chupón en los labios, les digo que es bien tranquilito. Tome a enzo en mis brazos y comencé a darle besitos por toda la carita, mientras sentía muchísimo amor al hacerlo.

— ¿ quien te ama tanto ?.— le preguntaba de forma divertida a mi bebé mientras él me miraba con una sonrisita.— pues yo pues yo .— dije con una sonrisa mientras le hacía cosquillitas en la pancita y el reía.— tú mami te ama con todo su corazón mi príncipe hermoso.— decía mirandolo y enzo tenía una sonrisa en su rostro mientras con sus manitas intentaba tocar mi cara y yo le facilitaba eso acercándome más a él, estos son pequeños momentos que amo de ser madre :) .

Única :peso pluma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora