el comportamiento de Malfoy

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Era un sábado en la mañana, en el cual estaban todos a penas despertando incluyendo a Draco Malfoy; el príncipe de las serpientes. A pesar de estar despierto desde hace un buen rato, Draco estaba acostado en su cama pensando en el incidente ocurrido el día de ayer con su enemigo, Harry Potter ya que al menos ante sus ojos, había sido extremadamente extraño.

El día anterior, viernes por la tarde, Draco iba con Pansy caminando por los pasillos de Hogwarts escuchando como la chica hablaba sin parar, aburriendose tras cada palabra de su amiga. Todo era aburrido hasta que vio a Ron y Hermione corriendo en dirección hacia ellos mientras reían lo cual lo hizo voltear a ver a Pansy mirándose extrañados el uno al otro.

—siempre he sabido que los de Gryffindor están locos ¿pero esto?— Draco volvió a mirar la escena de ambos leones corriendo aparentemente persiguiendo algo a pesar de que obviamente no hay nada.

—Drake estos tipos son completamente idiotas, si siguen corriendo como si los persiguieron un asesino van a chocar con algo— Pansy miró con extrañeza la situación viendo como ambos chicos se habían hecho a un lado mientras seguían corriendo probablemente para no chocarlos, sin embargo, Draco siendo Draco miró con una sonrisa maliciosa a Pansy —alguien tendrá que detener a ese par ¿no es así?— Pansy le sonrió con complicidad. Cuando ambos chicos estaban a unos metros, Malfoy dió un paso hacia el costado con la intención de interrumpirlos, pero a cambio de eso, a penas hizo eso, sintió un peso tirandolo hacia atrás y hacerlo caer.

Ron y Hermione se detuvieron asustados e impactados y caminaron con rapidez hacia Draco mientras que Pansy, sin saber muy bien que había pasado, se dio vuelta hacia Draco intentando averiguar lo que había pasado. Draco sentía un extraño peso sobre su regazo y escuchó una queja proveniente de algún lado a pesar de que aparentemente no había nadie más que su amiga y los dos leones.

—por amor a Merlín, Malfoy... ¿tenías que ponerte ahí?— preguntó Harry saliendo de abajo de su manto invisible dejándose ver aterrizado en el regazo de Draco, quien lo miró con enojo.

—¿que culpa tengo yo de que estés corriendo por ahícomo un idiota? Y encima con esa capa invisible— refunfuño con enojo a Harry, quien frunció el ceño. Malfoy iba a seguir hablando, pero de un segundo a otro comenzó a fijarse demasiado en Harry, en como estaba únicamente en camisa, sin usar esos horribles abrigos holgados, ahora se veía mejor su esbelta figura, y al tenerlo tan cerca, pudo notar el rojo de sus mejillas por haber estado corriendo, sus hermosos ojos verdes en los que siempre se había fijado pero nunca tuvo la oportunidad de verlos tan de cerca y ese cabello rebelde que siempre llevaba alborotado.

—gracias Mione, estoy bien— fue lo que escuchó Draco cuando volvió a la realidad viendo como Harry se levantaba nuevamente con ayuda de Hermione y Ron a su lado quien tenía la capa de Harry en sus manos.

—como siempre la comadreja, la come libros y Potty, el estúpido Potty— se burló Draco al levantarse del piso y sacudir sus pantalones del polvo, reincorporandose al lado de Pansy quien miraba mal a Ron y Harry, pero al llegar a Hermione su mirada se suavizó notablemente.

Harry comenzó a discutir con Draco algo molesto por los insultos hacia sus amigos y su enojo por haberlo chocado mientras se acomodaba sus lentes los cuales habían quedado algo inclinados para luego pasar sus manos por sus costados con la intención de deshacerse del polvo, marcando levemente su silueta provocando que Draco se quedara completamente callado mientras miraba de forma inconsciente la delgada cintura que el chico poseía; quería tenerlo en su regazo de nuevo, tocar su cuerpo delgado por el mismo y comprobar si le gustaba tanto como se hacía ver; esos eran los pensamientos de Draco hasta que se dió cuenta de lo que estaba pensando provocando que alzara la vista encontrándose con la comadreja y Harry molestos y a Hermione mirándolo con extrañeza.

—¡ya cállate Potter!— exclamó Draco con molestia y confusión sobre lo que había pasado haciendo enrojecer sus mejillas —¡y Pansy! ¡Deja de discutir con éstos!— se giró hacia su amiga.

—Potter tu y tus amigos son unos completos idiotas. Pansy vamonos porfavor— dijo con aparente severidad y giró sobre sus talones seguido de Pansy, devolviendose en dirección a la torre de Slytherin.

Volviendo con el actual estado de Draco, ahora está sentado en su cama terminando de recordar lo que había pasado, recordando el ligero peso y la calidez del cuerpo de aquel Gryffindor al que tanto odia sobre su regazo y como a pesar de odiarlo, quiere volver a tenerlo aún que sea solo una vez más.

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Hola, espero que estén disfrutando esta nueva historia Drarry, soy nueva en este shipp a pesar de haberme visto HP hace un tiempo así que aún me estoy informando de los headcanons que hay sobre esta linda pareja. Pido que me tengan paciencia.