el comportamiento de Malfoy

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Al día siguiente, Harry se levantó un poco más tarde que sus otros amigos por lo que al despertar, Ron ya no estaba. Abrió los ojos lentamente y con algo de sueño aún, se reincorporó en la cama sentándose apoyado de sus brazos. Se sentó en la orilla de la cama para alcanzar sus lentes los cuales estaban encima de la mesita de noche y colocarselos estirándose durante unos cuantos segundos y luego volver a colocar sus brazos sobre la cama haciendo que una de sus manos quedara sobre la chaqueta de Draco con la cual había dormido haciéndolo despertar completamente y volviendo sus mejillas rojas.

—ah... se me había olvidado— murmuró para si mismo y se levantó de la cama agarrando la chaqueta para doblarla y colocarla sobre una silla —no debí hacer eso... ni siquiera sé porqué lo hice— sus mejillas se tiñeron de un rojo más intenso.

Harry se levantó, hizo su cama, y se dirigió al baño para cepillarse los dientes, bañarse y vestirse para finalmente salir del baño, abrir las ventanas y finalmente salir de su habitación y bajar por las escaleras en dirección a la sala común de Gryffindor, donde estaba Ron jugando ajedrez con Dean y Hermione estudiando sentada en el sofá y la mayoría de sus compañeros repartidos por la sala conversando, leyendo o haciendo alguna otra actividad. Vio a Hermione, pero al notar que estaba estudiando, prefirió no acercarse ya que no le iba a hacer caso así que decidió ir a ver a Ron.

—buen día Ron— saludó sentándose al lado del pelirrojo quien estaba concentrado en el ajedrez.

—buen día Harry...— dijo en un tono serio debido a la concentración.

—me preguntaba si quieres acompañarme a la biblioteca.

—lo lamento hermano, no puedo ahora— dijo sin siquiera mirar a su amigo.

—claro, en ese caso nos vemos luego— esperó unos segundos alguna respuesta por parte de Ron, pero no obtuvo ni siquiera un sonido o movimiento así que simplemente se levantó y salió de la sala común encaminandose a la biblioteca.

Minutos después, ya estaba llegando a la biblioteca caminando con tranquilidad y pensando en que tipo de libro podría leer una vez que llegara. Inmerso en sus pensamientos, sufrió de un gran susto cuando sintió su espalda repentinamente pegada a la pared de piedra.

—ugh...— gimió con molestia y alzó su vista arreglando sus lentes los cuales se habían inclinado un poco.

—Mmh... ¿que tenemos aquí?— preguntó Draco con una burlona sonrisa y llevando una de sus manos a la cintura de Harry mientras que con la otra lo acorralaba. —Potter ¿a donde ibas?

—que te importa, Malfoy— respondió algo molesto por las acciones del Slytherin.

—claro que me importa— acercó su cuerpo aún más al de Harry haciéndolo sentir extraño, ya que si bien si lo estaba molestando, tenía un semblante algo coqueto.

—voy a la biblioteca, y ya déjame— respondió seco y con molestia en su voz poniendo su mano en el hombro de Draco intentando moverlo para irse, pero Draco sujetó su cintura con ambas manos para en un movimiento repentino volver a ponerlo contra la pared.

—que curioso, yo también estoy yendo hacia allá— sonrió, pero internamente sentía sus manos quemar y su corazón a punto de explotar por poder sujetar la cintura de aquel chico. —¿ibas a verme?

—¿cómo voy a ir a verte?— hizo una cara de rechazo y frunció levemente el ceño —obvio que no, que asco, Malfoy.

—y ya sueltame, que no me gusta estar cerca tuyo— debido a la cercanía, Harry podía oler claramente su perfume —tu perfume...

—tu perfume...— recordó la chaqueta y como se había quedado dormido con ella anoche haciendo sus mejillas enrojecer y desviar la mirada.

—solo déjame— dijo molesto finalmente para soltarse con brusquedad del agarre de Draco volviendo a encaminarse hacia la biblioteca dejándolo algo confundido al principio, pero aún así, aceleró el paso para caminar a su lado.

—entonces ¿si ibas a verme?— preguntó una vez que se puso a su lado nuevamente comenzando a caminar con el.

—deja de seguirme.

—yo también voy a biblioteca ¿recuerdas?— sonrió ladinamente y rodeó la cintura de Harry para obligarlo a detenerse y que lo viera a los ojos. —ahora responde.

—obvio que no iba a verte, Malfoy— rodó los ojos con molestia y volvió a alejarse del agarre.

—que lástima, Potty, yo pensé que me querías.

—si claro, a tí quien te va a querer— entró a la biblioteca y comenzó a caminar para meterse a uno de los pasillos hechos de estantes con libros y comenzando a buscar.

—no olvidemos que te encontré metido en mi habitación.

—tu y yo sabemos que eso fue porque seguramente estabas metido en algo raro— respondió poniéndose de puntillas para tener una mejor visión de todos los libros.

—¿no era por que querías verme?— se burló apoyándose en el estante detrás de Harry y viendo como este se ponía de puntillas y luego volvía a bajar en busca de algún libro.

—tu nueva forma de molestar es lo peor— se quejó hasta que vio el libro que quería hasta arriba.

—ah...— emitió un ruido de felicidad al encontrar el libro que quería haciendo que Draco sonriera de emoción y sus ganas de abalanzarse sobre el y comérselo a besos aumentara.

Se puso de puntillas una vez más y con una mano se afirmó y la otra la estiró con intención de alcanzar aquel libro que tanto anhelaba. Draco lo vio con ternura y se acercó a él por detrás, poner una mano en su hombro y hacer que simplemente dejara de ponerse en puntillas para el mismo alcanzar el libro.

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