ℕ𝕦𝕖𝕤𝕥𝕣𝕠 𝔻𝕖𝕤𝕥𝕚𝕟𝕠 | 𝔼𝕟𝕚𝕕 𝕊𝕚𝕟𝕔𝕝𝕒𝕚𝕣 𝕩 𝕋𝕟 𝔸𝕕𝕕𝕒𝕞𝕤

#2

                 𝐑𝐞𝐬𝐢𝐝𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚 𝐀𝐝𝐝𝐚𝐦𝐬

Hades abrió sus ojos al oír el molesto despertador, lo apagó y comprobó qué eran las 5 de la mañana, sus clases comenzaban a las 06:30. Sin perder más tiempo estiró su cuerpo haciéndo sonar sus huesos y se metió al baño a ducharse. Unos minutos después salió con su típico traje blanco.

Término de alistar todas sus cosas y bajó hasta la cocina a preparar el desayuno. Escuchó sonidos de pasos bajando las escaleras y vio a Merlina vestida con el uniforme de la escuela.

— Buenos días, dame unos minutos y voy a terminar el desayuno. ¿Tienes tus cosas ya listas? — Preguntó sin recibir respuesta.

Le dejó en la mesa unos huevos revueltos con un cuádruple de hielo, mientras Hades solamente tomaba café en silencio, nunca salió una palabra de la boca de Merlina, ni siquiera lo miró.

Unos minutos después terminarón y vierón qué eran las 06:00. Merlina iba a salir para esperar el autobús pero se percató de qué Hades fue a la cochera, poco después lo vio sorprendida un poco el auto en el qué iba su hermano.

— Vamos sube de una vez, hermana. No me apetece llegar tarde el primer día – Ella no le respondió y subió al auto sin mirarlo.

Hades disfrutaba mucho de ir a toda velocidad en las desoladas carreteras, sentir esa brisa fría de las mañanas inundar todos sus sentidos. Era una verdadera belleza y los paisajes no se quedaban atrás. Consideraba muy seriamente el quedarse a vivir aquí.

— Di lo qué piensas. Jamás te quedes con las palabras en la boca. Causarán muchos problemas a futuro — Dijo sin quitar su mirada de la carretera.

— Supongo qué este auto también es uno de los tantos regalos qué Mís padres te dierón ¿Cierto? Ja... Cómo siempre hacen preferencia contigo.

— Es mí regalo de cumpleaños de parte de nuestro padre. Aún eres demasiado pequeña para conducir esté auto. Preferencia no, se llama responsabilidad, soy mayor qué tú y por éso puedo conducir.

— Cómo dije, preferencias — Retomaron su camino en silencio, unos minutos después llegarón hasta un enorme edificio repleto de muchos jóvenes, aparcó el vehículo en un costado del edificio, varias miradas de todos los presentes estában enfocadas en los hermanos Addams.

Ignorando por completo sus acciones se metieron en la escuela hasta poder llegar al pasillo principal. Aquí se separaban. Los 2 estában en distintas clases.

— Tu salón está en esté piso, el mío en el último. Ya sabes qué hacer Merlina, si necesitas algo llámame.

— Adiós — Hades suspiró al menos había logrado conseguir una despedida, subió a la última planta, al llegar al salón vio qué se encontraban muchos estudiantes, ignoró todas la miradas y fue a tomar asiento al final del salón. Mientras disfrutaba de las vistas el maestro ingresó en el aula.

— Buenos días a todos, antes de comenzar la clase de hoy el director me comunicó la llegada de un nuevo estudiante, ¿Podría el levantarse y presentarse ante la clase? – Todas las vistas regresarón hasta Hades qué se puso de pié.

— Me llamo Hades Addams, no me interesa tener algún tipo de contacto con ninguno – Fue su presentación ganándose risas de varios alumnos qué obviamente ignoró.

— ¿Escucharón al idiota? ¿Acaso eres un dios? No creas qué por tener un nombre lo serás, únicamente eres un afeminado — Le habló a toda la clase un joven de cabello largo marrón. Toda la clase se río.

— Señor Thorpe, callese o tendrá qué ir con el director a su oficina — Habló con firmeza haciéndolo callar y empezar con la clases.

Para desgracia de Hades, las 2 horas de la clases le parecieron toda una eternidad. Hasta oír el sonido de la campana indicando el fin de la clase. Tomó su mochila y salió hasta la cafetería, buscó con la mirada una mesa vacía para estar tranquilo, en el fondo vio a una y fue caminando hasta allí.