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#27

— ¿En dónde demonios estás Hades? — Ya desde hace 1 hora esperaba a su amigo y no había aparecido.

Los funcionarios se encontraban muy molestos al ver qué el jefe de la empresa no aparecía ya después de haberse pasado la acordada hora.

Qin había intentado comunicarse con los 2 hermanos Addams y ninguno aceptó sus 5 llamadas. Pensaba en qué más podía hacer y fue en ese segundo en qué a su celular le llegó la llamada y vio qué era Hades.

— ¿En dónde mierda estás...?

— Por favor... En-Enid... Salvala... Academia...

Qin sintió un horrible y fea sensación bajar por su espalda, su voz estába moribunda y parecía qué iba a morir.

— ¡Hades! ¡Por favor hablame!... ¡Ey! ¡¡Hades!!

Desesperado intentaba comunicarse, pero de pronto la llamada se cortó. Estába muy desesperado al no saber qué podía hacer, debía ir a buscarlo, entonces recordó sus palabras de hace unos instantes.

Tenía sólo dos opciones y tiempo era todo lo qué le faltaba. No había tiempo para aún seguir perdiendolo allí. Qin salió corriendo a buscar a todos los guardias para salir en búsqueda de Enid.

Mientras qué otro grupo salió a buscar a su mejor amigo, debía y los salvaría, tenía un mal presentimiento sobre todo esto.

— Por favor, Hades, Enid... Ya voy en camino. Resistan un poco más.

Muchas cosas sucederían aquella noche y todo se debería a una persona demasiado obsesionada y loca por un amor qué nunca sería correspondido.. aunque, ellá nunca lo aceptaría.

Jamás aceptaría perder a su amado, y Enid iba a conocer su enfermo amor.

[...]

La noche había terminado cómo su ensayo de esté día, sinceramente estába agotada y sólo quería irse a descansar con su familia.

Enid salió de la ducha guardando todas sus cosas en su bolso, antes de salir recibió un llamado de un número desconocido. Tenía una extraña sensación en su cuerpo, pero decidió ignorarlo y pensar qué se debía al cansancio, aceptó la llamada.

— ¿Hola con quién hablo?

— Enid, soy Homero Addams, el padre de Hades.

— Hola, Sr Addams. ¿Cómo consiguió mí número y para qué me llama? — Habló con respeto a pesar de haber sido tratada de lo peor con su esposa e hija.

— Rose lo tenía escrito en su mochila y te llamaba para saber sí vendrán a buscarla o se quedará a dormir aquí con nosotros.

— ¿No llegó Hades a buscarla? El me dijo qué iría a buscarla después del trabajo. ¿El no llegó con ustedes? — Preguntó extrañada. Hades nunca hacía esas cosas.

— Solamente vino a dejar a Rose está mañana, después nunca más se comunicó conmigo o contigo. Se fue temprano con Merlina al trabajo.

— De acuerdo, iré a buscarla en su casa sí no tiene problema.

— Para nada, le comunicaré a Rose para el tenerla lista. Ten cuidado en el camino — Y sin más cortó la llamada ambos.

Se le hizo bastante extraño qué Hades no halla buscado a Rose después de tener ya mucha insistencia en no dejar a su hija en esa casa mucho tiempo.

— Ya lo verás, Hades. Tendremos una muy larga conversación sobre temas de responsabilidad.

Enid tomó su bolso para marcharse al salir por la puerta fue tomada de atrás para así sentir una mano tapando su boca evitando qué pueda gritar o pedir ayuda.