ℕ𝕦𝕖𝕤𝕥𝕣𝕠 𝔻𝕖𝕤𝕥𝕚𝕟𝕠 | 𝔼𝕟𝕚𝕕 𝕊𝕚𝕟𝕔𝕝𝕒𝕚𝕣 𝕩 𝕋𝕟 𝔸𝕕𝕕𝕒𝕞𝕤

#26

Sentía muy bien cómo toda mí cabeza dolía demasiado y también contribuía mucho al liquido rojo qué salía de mí cabeza. Igual qué de todo mí cuerpo, ya no puedo sentir nada.

Siempre deseé tener una vida sin problemas y tranquila, el destino, toda mí existencia se encontraba en mí contra desde mí nacimiento.

Al parecer después de todo una vez más había fallado cómo toda mí vida lo hice, está era mí mayor pérdida, sólo quería protegerlas.

Las piernas me fallarón para caer desplomado al suelo, toda la sangre hizo un charco a mí alrededor. Había perdido desde hace unos minutos la movilidad de mis manos. Sólo sentía cómo la sangre salía de mí cuerpo.

Era mi momento de descansar, sólo hubiera deseado pasar más tiempo con ellas... Nunca las olvidaré.

— Pa-Papá... te ruego qué... las protegas...

Todo lo qué una vez conocí cómo mí vida se arruinó en tan sólo unas pocas horas, siempre cargaré esté error toda mí existencia. Todo fue por tu maldita culpa...

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24 𝑯𝒐𝒓𝒂𝒔 𝑨𝒏𝒕𝒆𝒔

Estacionó su vehículo en la entrada de su casa para meterse directamente hasta su habitación ignorando las miradas de su seguridad y empleados.

Hades cayó en su cama tirando el maletín a mitad del camino, estiró sus manos para tomar una almohada descansando un rato.

Durante estás dos últimas semanas había estado muy estresado debido a estar a un par de días de navidad ya debía terminar los acuerdos qué tenía con los más importante socios de su empresa. Lo qué significaba tener juntas hasta la madrugada sin parar.

Además de sus problemas laborales no se había quitado de la cabeza lo sucedido al respecto con Merlina, no había olvidado su último encuentro.

Le era imposible verla cómo lo hacía hace un mes atrás, siempre qué sus miradas se cruzaban ellá simplemente le sonreía con arrogancia y bastante deseo, perfectamente notaba cómo en sus ojos brillaba la locura y la maldad.

Lo qué más impacientaba era el hecho de verla actuar cómo un día normal, pero en su corazón sabía qué no lo amenazaria de la manera qué hizo y quedarse sin hacerle algo. La conocía. No le gustaba para nada está paz de momento, para nada.

Abrió con mucha pereza sus ojos al sentir unas muy suaves manos en su rostro, todavía somnoliento observó cómo Enid le tiraba una sabana encima suyo para cubrirlo del frío.

— Mí Hades, descansa por favor cariño — Le daba mucha pena ver a su novio tan agotado, pero era su trabajo y por más intentos de hacerlo cambiar de parecer eran en vano.

Siempre era la misma frase qué Hades le decía estás últimas semanas.

"𝑻𝒐𝒅𝒐 𝒎𝒊 𝒆𝒔𝒇𝒖𝒆𝒓𝒛𝒐 𝒆𝒔 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 𝒃𝒊𝒆𝒏𝒆𝒔𝒕𝒂𝒓"

Hades tomó la mano de Enid para hacerla acostar a su lado y abrazarla protegiéndola. Enid se abrazó a su pecho mientras acariciaba su largo cabello blanco.

— No me abandones nunca, eres todo para mí Enid... Te necesito — Susurró prácticamente dormido.

Enid al ver qué ya se había dormido sonrió un poco para dejarle un beso en sus labios.

— Nunca lo haré, mí amor. Siempre tu Enid estará cuidándote al igual qué nuestra hija... Tú arcoiris siempre va a cuidar de su diablito.

Enid no necesitaba dinero, lujos, ropas de marcas costosas, no quería nada de eso. Sólo quería estar siempre junto a su nueva y verdadera familia, al fin era feliz junto con Hades y su pequeña Rose. Su felicidad era algo bastante simple de conseguir.