Kimetsu no Yaiba [ Inverso ]

Capítulo 2.- Sobrevivir a las manos

Un montón de pesados y estremecedores pasos se acercaban a lo lejos, cada vez se encontraba más cerca de ellas.

La chica de ojos lilas se puso en guardia, había logrado divisarlo a lo lejos gracias a su excepcional vista. Era gigantesco e imponente. Pero ella no titubearia.

- Escucha, Aoi. Es un demonio muy grande, parece estar rodeado de manos y su piel se ve áspera y dura.

Explicó a su compañera, causando cierto nerviosismo en ella al darse cuenta de lo peculiar de este demonio.

- ¡Diablos! ¡Sabía que venir aquí era mala idea!

Sin tener más remedio que ayudarla, se colocó en posición también.

- No te preocupes, nuestras Respiraciones se complementan, seguro podremos ganar.

Dijo, tratando de reconfortarla. Las dos habían compartido muchos momentos juntas, y se conocían bien aún con la pared invisible entre la tranquila chica y la joven de ojos azules.

- ¿Quiénes con ustedes, cazadoras? ¡No hace falta que respondan! ¡No son más que carne fresca para mi alimentación!

Habló el demonio tras finalmente haber llegado a estar frente a ellas tras aquellos interminables segundos.

- ¡Ahora mueran!

De su cuerpo numerosas manos arremetieron contra ambas chicas, estas saltaron a lados contrarios logrando evadirlo.

- Respiración de las Flores: Sexta Postura - Melocotón Giratorio

Moviéndose en el aire impulsada por su propio peso corporal logró cortar un par de manos. Cayó firmemente en el suelo y una nueva andanada de ataques venían a ella.

Se defendió con su espada cortando los incesantes intentos del demonio por atraparla.

"Es muy fuerte. Siento la fuerza tan solo con los impactos de sus manos al ser cortadas por mi espada."

Pensó. Decidió analizar a su oponente, debía encontrar algún tipo de patrón en sus movimientos.

- Respiración del Agua: Segunda Postura - Rueda de Agua

Con un corte giratorio completo, la joven de azulados ojos corto verticalmente las manos que la seguían, captando la atención del demonio, quien de inmediato la miró con unos penetrantes ojos llenos de odio.

- ¡Tu! ¡Usaste la Respiración del Agua! ¿¡Dime quién es tu maestro!?

Cuestionó de inmediato, confundiendo a la chica.

Sin darle tiempo de responder la atacó nuevamente al notarla distraída. La joven vio su fin tan cerca.

Pero este estuvo lejos de llegar, gracias a la intervención de su compañera.

- ¡Respiración de las Flores: Segunda Postura - Sombra Honorable de la Ciruela!

Poderosos cortes defensivos cubrieron el cuerpo de su amiga de ser lastimada por aquel horrible ser.

- ¡Aoi! ¡No te distraigas, por favor!

Pidió sudando, había hecho un gran esfuerzo en llegar a tiempo para cubrirla.

- ¡Sí! ¡Lo siento!

Dijo apenada. Pero aun así permaneció pensativa.

"¿Me preguntó por mi maestro, no? ¿Tiene algo contra los usuarios de la Respiración del Agua? ¿O contra uno en concreto? Pero... Creo que los Pilares son los que encierran demonios aquí, en ese caso..."

Ambas evitaron un nuevo ataque, para luego moverse a su alrededor con fluidez tratando de cortarlo en múltiples ocasiones, pero las dejó sorprendidas al regenerarse velozmente, el demonio no solo era fuerte, era resistente.