La Niñera De La Familia Sarocha [Editando]

Nos Vamos A Inglaterra

Freen se encontraba caminando de un lugar a otro bajo la atenta mirada de Becky quien muy impaciente se levantó de su lugar tomando a Freen por los hombros —Tu feromonas comienzan a marear a todos los omegas del hospital —Freen miró hacia varias direcciones notando que lo que decía la Omega era cierto.

—Es que estoy nerviosa, mi hijo está naciendo en estos momentos.

—Lo sé, ¿Pero podrías calmarte por favor? —la alfa tomo aire y ambas se sentaron —El tiempo paso rápido.

—Sí —respondió Becky.

Ocho Meses Atrás

La cena con la familia de Gaby había ido perfecta y Freen estaba orgullosa de ver a su hija feliz. Después de varias horas compartiendo entre ellos la hora de volver a casa había vuelto.

Todos se despidieron y no tardaron mucho en llegar de nuevo a la mansión dónde aquella persona que sacaba de quicio a Becky abrió la puerta con una gran sonrisa —¿Ya llegaron?

—No, todavía seguimos en casa de Gaby —respondió Becky con ironía haciendo reír a Nam, disimuladamente ambas chocaron las palmas —Becky —dijo Freen. La Omega rodó los ojos y todos entraron a la casa, pero Becky se vio detenida por Heidi —¿Qué se siente ser la segunda opción?

—¿Qué se siente que este contigo solo porque estás embarazada? —la sonrisa de Heidi se borró y Becky siguió su camino.

Actualidad

—Becky yo...

—Becca amor —Wiliam se acercó a Becky dándole un pequeño beso en los labios —Te estube buscando por todos lados.

—Es que ya va a nacer el hijo de Freen y no quería dejarla sola —respondió con una sonrisa. Wiliam miró a Freen con desagrado haciendo que la alfa lo mirara de la misma forma —Me imagino que ya estás acostumbrada, después de todo ya has tenido dos hijas.

—Nam y Saint también son mis hijo —dijo Freen levantándose de su lugar —Adoptados —Becky golpeó a Wiliam por la espalda haciendo que este se quejara —Te pediré que no opines acerca de mis hijos —el aire comenzaba a ser tenso —Bueno, Wiliam ¿A qué has venido?

Becky trataba de suavizar el entorno —Solo quería recordarte que el próximo mes es nuestro viaje a Inglaterra, ya es hora de que me haga cargo del negocio, tu sabes de qué hablo.

Seis meses atrás

Las cosas en la mansión iban horribles desde que Heidi se mudo a ella. Los niños se negaban a comer en la misma mesa que Heidi, Freen volvió a trabajar sin descanso y ahora Becky no solo tenía que cuidar a los niños, si no también cuidar por el embarazo de Heidi.

—¡Rebecca! —se escucho un grito desde el cuarto de visitas —Becky, siento mucho que estés pasando por esto —dijo Nam despegando su mirada de la computadora —Yo también. Vigila que por favor terminen de hacer los ejercicios, volveré pronto... Espero.

Becky se dirigió hasta la habitación de Heidi y al entrar se encontró a una Omega con el cabello pintado de color verde y no pudo evitar retener una pequeña risa —¿Te causa gracia? —Becky dejo de reírse —Esos engendros del demonio, ¿Mira lo que hicieron?

—No las llames engendros. Solo fue una pequeña broma.

—¿De verdad piensas eso? Mira mi cabello. No sé que harás, pero espero que esto de verdad quite o haré que esas escuinclas terminen en un orfanato.

—Estúpida perra —dijo Becky en un susurro —¿Qué dijiste?

—Qué eres una estúpida perra —dijo sin miedo haciendo que Heidi golpeara su mejilla, en ese instante Becky también elevó su mano —¡Atrévete y le diré a Freen que me pegaste! ¡Qué le pegaste a una mujer embarazada! —con todo y enojo Becky bajo su mano y salió de la habitación de Heidi.

Actualidad

Freen miraba confundida la escena —¿Te irás de viaje? —preguntó y Wiliam solo sonreía —No es momento para hablar de eso —dijo Becky —Volvere pronto —tomó la mano de Wiliam y lo llevo hasta el estacionamiento del hospital.

—¿Por qué dijiste eso?

—¿Decir qué?

—Que me voy a Inglaterra contigo. Estaba esperando el momento adecuado para hablarlo con Freen y los niños.

—Amor, perdón. Pensé que ya le habías dicho.

—Siento que lo hiciste con la intención de molestar a Freen.

—Por supuesto que no —Wiliam atrajo a Becky hacia él para abrazarla —Me emociona mucho recordar la vez que aceptaste ser mi novia.

Tres meses atrás

Becky se dirigió con Song hasta el despacho de Freen ya que por alguna razón ella quería presumir le a su madre que se le había caído uno de sus dientes de leche. Cuando entraron al despecho Heidi estaba sobre el regazo de Freen mientras la besaba.

Song apretó con delicadeza la mano de Becky y volvieron a cerrar la puerta —¿Mamá ama a Heidi?

—Creo que si cariño —dijo Becky tratando de retener el llanto —Pero yo quiero que mamá este contigo.

—No todo se puede tener en esta vida —el timbre sonó en el lugar y Becky se dirigió a abrir encontrándose con un grupo de mariachis y Wiliam en medio de todos estos.

(Nos saltaremos la canción)

Después de haber cantado, Wiliam se dirigió hasta Becky arrodillándose frente a ella —Rebecca Amstrong, ¿Me dejas ser tu novio? —en ese momento la imagen de Freen y Heidi besandose invadió la mente de Becky —Sí —dijo con lágrimas en sus ojos.

No lloraba por estar feliz de que Wiliam le propusiera ser su pareja, lloraba por el hecho de quizás el corazón de Freen ya no le pertenecía. Song miraba la escena un poco triste, Heidi que al escuchar el ruido salió y miraba la escana con alegría.

En cambio Freen, estaba triste y enojada con ella misma, ahora sí puede decir que ha perdido a Becky y quizás para siempre.