Tus Ojos Y Olvido

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—¿Me perdí de algo?

—De casi nada —habló para seguir prestando atención a aquel baile.

Cuando el baile terminó, Becky fue a cambiarse para irse hacia la casa.

—Me alegra que Freen no te haya descubierto, pero Becky… —le habló Irin mientras ella planchaba su cabello —:Deberías decirle, quizás ella lo entienda —sugirió, Becky dejó la plancha a un lado y miro a su amiga.

—No Irin, sé cómo es y no me dejará estar cerca de los niños nunca más —volvió a girarse para seguir planchando su cabello.

—Bien, tú sabes lo que haces —salió del camerino.

•°•°•°•°•°•°•°•

Becky había llegado a la casa minutos antes que Freen, lo cual le permitió darse una extraña ducha a las tres de la mañana.

Freen al llegar fue por un vaso de agua y luego a ducharse, tener el aroma de Heidi impregnado en ella no era muy agradable «¿cual era el aroma de aquella chica?», pensó, pues al estar concentrada en otras cosas, no se fijó en ese detalle.

•°•°•°•°•°•°•°•

Al día siguiente todos se habían levantado, menos Freen y Becky que todavía seguían dormidas.

—Que raro que estén dormidas, ellas siempre son las primeras en levantarse —habló Nam.

—¿Qué habrá pasado anoche? —preguntó Saint. —:¿Tú crees?

—Puede ser, tal vez si, tal vez no —hablaban entre ellos.

—No entendemos su conversación —dijo Belove ya que ella y Song no sabían a qué se referían.

—Algun día entenderán hermanitas... Algún día, vamos a desayunar —todos bajaron a la cocina, para desayunar.

Al terminar, el chófer los llevó hacia el colegio, dónde cada uno fue a su respectivo salón.

A Saint ya no le hacían bullying por su cambio de look al contrario ahora todas las chicas querían estar con él, pero a él solo le interesaba una. —Hola guapo —habló una voz femenina.

—Mm hola Lauren —habló un tanto nervioso. -

—Quería saber, si hoy puedes salir, quiero invitarte a comer.

—Claro, no hay problema —dijo con una sonrisa. Aquella Beta se acercó hacia Saint y plantó un beso en la comisura de sus labios para provocarlo un poco.

—A las tres en mi casa, no tardes y mucho menos faltes —dicho esto se fue hacia su lugar. «Tengo que contarle esto a Becky».

Por otra parte Nam estaba en su salón con sus audífonos puestos escuchando alguna canción, hasta que sintió que alguien se los había quitado. —Hola bella dama —dijo un Omega, pero no cualquiera, el Omega que todos en este salón y colegio querían tener. Pero ella no se encontraba entre el término "todos".

—Hola, ahora devuélveme mi audífono y vete a molestar a otra parte —dijo en tono frío.

Si, el era el Omega más popular que tenía a todos los alfas haciendo lo que querían menos por Nam quien le interesaba muy poco lo que él haga o deje de hacer.

—Entre más me rechazas más me gustas —dijo acercándose a ella. —:Quiero tenerte.

Nam se acercó a él y dejó un beso en sus labios bajo la atención de toda la clase. —Sigue deseándome —dicho esto se cambió de puesto. Nam no sentía atracción hacia nadie todavía, no sentía atracción hace unos segundos, pero al ver pasar por esa puerta una chica de cabello rubio, ojos azules, tez blanca y con un olor coqueto e hipnotizante «¿Quien es? La quiero», habló.

La Niñera De La Familia Sarocha [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora