Capítulo 15. Él es mío

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Susan

Pasar el tiempo con Carlos se a convertido en mi quehacer favorito, cuando no está entre mis piernas yo estoy sobre él cabalgándolo como una ninfómana que lo único que desea es follarlo hasta el último de sus días. Los paseos en sus lujosos coches se hacen comunes . Es un hombre que le encanta el lujo, su casa y todo lo que posee son muestra de ello . Me llevó a el Rulay el restaurante más caro de la ciudad donde me dejó pedir todo lo que quise sin mirar el precio. Los platos son carísimos pero a él no parece importarle solo me dice que pida lo que me apetezca .

- Pide lo que quieras - me dice besando mis nudillos.

Al salir del local me toma de la cintura lanzando miradas de advertencia al ver como varios hombres me miran encantados . Para Isidro era la mujer más fea del mundo y por ello me tiré al abandono porque me aborreció de tal manera que me creí ser el ser más horrible del planeta, pero ahora me doy cuenta de que soy linda y nunca más voy a pensar lo contrario .

«Antes los ojos equivocados siempre serás horrible pero ante los ojos correctos siempre serás arte »

- Sentir celos de los que me miran no es bueno para tu reputación de macho dominante - me burlo y enarca una ceja .

- No estoy celoso no hables tonterías - responde serio .

— No es lo que parece .

— No estoy celoso — rueda los ojos.

- Veamos si es cierto - me zafo de su agarre .

- Susan no te atrevas a ...
- le saco el dedo del medio divertida mientras empiezo a alejarme de él contoneando mis caderas de manera sensual . Los hombres me miran y no es para menos con el sexy vestido que tengo puesto, además mis caderas se han ensanchado haciendo que mi cuerpo se vea perfecto . Siento como varias mujeres me miran mal porque sus maridos me miran como depredadores. Incluso un chico vestido de traje oscuro, muy elegante trata de acercárseme y en cuestiones de segundos Carlos me toma de la cintura con posesividad.

- ¿Se te perdió algo?- le pregunta al chico del traje molesto.

- No, solo quería hablar con la joven - me mira de arriba a abajo con malicia.— pensé que estaba sola ...

- Es mi mujer y mejor mira a otro lado antes de que te saque los ojos por mirar lo mío - Carlos lo amenaza y el hombre se aleja evitando problemas. «¿Su mujer dijo?»

- ¿Soy tu mujer?- le pregunto y molesto tira de mi brazo sacándome de allí . Me lleva hasta su coche y noto que casi está echando humo por los poros de lo cabreado que está.

- ¡¿A qué coño estás jugando?! - me ladra cuando estamos dentro del coche .

- Quería demostrarte que sí te provoca celos que otros me miren - le respondo tranquila — sabes no es malo aceptar lo que sientes...

- No vuelvas a hacer lo que hiciste — inquiere molesto .

- ¿Y qué se supone que hice? que yo sepa no fue nada de otro mundo .

- ¡Saliste de mi lado mostrándote para que los demás te vieran! - se altera y yo lo miro boca abierta.

- ¿Qué estás diciendo?

- ¡¿Querías llamar la atención de los demás es eso? ¿mi atención no es suficiente para ti?!

- ¡No tengo la culpa de que los demás me miren, además contigo a mi lado lo hacían igual! - le grito .

- ¡No es lo mismo porque conmigo a tu lado se cohibían más, ese imbécil ...!

- ¡No me tocó, ni siquiera llegó a hablarme!.

Entre El Amor Y YoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora