Entre El Amor Y Yo

Capítulo 27 . El pasado y sus malas jugadas .

Cuando entramos al coche, no me he sentado aún cuando ya Carlos me coge y me sienta a horcajadas sobre él haciéndome sonreír .

- ¿Carlos que haces? .

- No estoy haciendo nada de lo que quiero ... aún - toca un botón y el coche se pone en marcha . Automáticamente el cristal oscuro sube interponiéndose entre el chófer y nosotros . Carlos comienza a subirme el vestido dejando mis tanga a la vista y esboza una sonrisa perversa .

- Carlos no te atrevas a ... - pero me callo cuando su mano hace pedazos mi tanga y yo frunzo el ceño .

- Te compraré todas las tangas que quieras - dice al verme molesta .

- Era mi favorita - trato de bajarme de sus piernas y aferra sus manos a mi cintura .

- Quietecita ... -  baja la mano  sosteniéndome por las nalgas - te dije que te voy a comprar todas las tangas que quieras incluso más lindas que esa, del modelo que quieras .

- Pero ...

- Ssssh ... -pasea sus labios por mi cuello y muerdo mi labio inferior - Me gusta romperlas es excitante su sonido - susurra mientras comienza a devorarme el cuello a pequeñas mordidas y besos .

- Haré que me llenes la habitación de ropa interior- se ríe .

- Y yo haré lo que tú quieras, pero ahora yo mando, así que harás caso a todo lo que yo te diga .

- ¿Y qué quieres que haga?—  sé la respuesta pero quiero oírla de su propia boca.

- Quiero que me cabalgues como la verdadera hembra que eres - aprieta mis nalgas y me pega más restregándome contra su dureza .

-¿Aquí en el coche, con Esteban conduciendo?- asiente relamiéndose los labios .

- Tranquila no hay de que preocuparse, el cristal es insonorizado .

-Pero... - me besa interrumpiéndome y le respondo el beso con la misma intensidad . Comienza a tocarme por todas partes, a besarme a morderme el cuello y yo jadeo perdiendo el control, me levanto un poco de sus piernas y se baja el pantalón junto con su bóxer dejando afuera su potente verga palpitante, erecto, y el capullo rosado brilla por la humedad en la punta, me muerdo el labio inferior deseosa de metérmelo hasta el fondo, Carlos se acomoda en el asiento recostando su espalda y eleva la pelvis dándome un azote.

- Todo tuyo mami - no lo dudo ni por un instante, lo cojo  guiándolo hacia mi húmeda entrada, me dejó caer sobre él sintiendo como me llena completamente, ¡Dios se siente maravilloso!, Carlos emite un jadeo cuando me la clavo toda . Comienzo a moverme de arriba a abajo jadeando como una puta mientras que el hombre a quien cabalgo me desabrocha los botones del vestido, saca mis tetas y me las devora con la boca, aumento el ritmo y él cierra los ojos echando la cabeza hacia atrás jadeando gustoso, succiono su rico miembro y él jadea más fuerte, vuelvo a succionarlo y él toma aire entre dientes .

— ¡Joder mami!— exclama fascinado .

¡Me gusta tenerlo así, me excitan sus jadeos, sus expresiones!. Empieza a moverse debajo de mí  frenéticamente poniéndome a chillar .

—Cómo me gusta follarme esta vagina — dice muerto de placer .

Nos besamos sin dejar de movernos, me sostiene de los glúteos entrando y saliendo cargádome de embestidas duras muestras me da nalgadas violentas que me hacen gemir más .
El sonido de mi cono empapado es excitante y me contoneo gustosa mientras mi agujero recibe los embates de una verga extremadamente grande y gruesa .
Gracias a Dios que el cristal es insonoro y Esteban no puede escuchar el sonido de sus estocadas mientras sus bolas chocan contra mi periné.