[CAPÍTULO DOCE: CONTROLAR EL AGUA]
RADNE NUNCA CREYÓ QUE una multitud de humanos le iban a gradecer haberlos salvado.
Una gran cantidad de adultos y niños la rodeaban como si fuera una diosa. Sus amigos se subían al barco que les habían regalado como agradecimiento por salvarlos. La rubia solo podía mirar al cielo y los humanos, alucinada con lo que estaba viviendo.
—No tenemos mucho, pero tomad —dijo el alcalde de Orange Town. —Es una muestra de agradecimiento.
Radne se puso de cuclillas, o al menos lo intentó para ver mejor lo que contenía la caja. Había varias piezas de frutas, muy apetitosas y varios trozos de carne.
—No, lo necesitáis — dijo Luffy.
Los demás miembros de la tripulación se dispusieron a subir al barco que por suerte para ellos, Buggy no había destruido. Luffy se dio la vuelta junto a Radne pero la chica sabía que algo no iba bien en cuanto vio exhalar al chico.
—Bueno... —corrió de nuevo hasta donde estaba el alcalde. —Solo un bocadito —sonrió.
Luffy tomó la mano de la rubia y ambos corrieron hasta el barco. Los aldeanos de Orange Town alzaban la mano despidiéndose de los piratas. Radne ya sabía lo que significaba así que los imitó con entusiasmo. El chico de rizos movía su sombrero en el aire despidiéndose igual de los ciudadanos de aquella pequeña ciudad.
—Ahora sería un buen momento para explicarte —habló Zoro a Radne.
—¿Explicarme de qué? —respondió la rubia.
—¿De cómo demonios eres una sirena son piernas, por ejemplo? —dijo Nami mientras colocaba bien las cuerdas.
Radne miraba hacia ambos lados, viendo como sus compañeros subían una ceja esperando una respuesta. Se rindió y comenzó a hablar.
—Bueno, todo comenzó porque me comí una fruta del diablo...
—¿Qué tan comunes son esas frutas? — preguntó Nami mirando de nuevo al chico del sombrero de paja, este tan solo se encogió de hombros.
—El caso es que me la comí y aparecieron — señaló sus piernas. —Pero al parecer no me afecta lo del agua salada, aun puedo respirar bajo el agua y conservo mis poderes de sirena.
—¿Poderes? — preguntó Zoro con los brazos cruzados.
—Sí, lo de la voz supersónica y controlar mínimamente el agua.
—¡¿Controlar el agua?! — exclamó Luffy sorprendido.
—Cuando estuve en el tanque... —dio un largo suspiro recordando aquel momento. El pequeño espacio, la ansiedad y el agobio constante ahí metido le provocaba mareos.
Luffy se dio cuenta de esto y no sabia como reaccionar. La hubiera abrazado, sin dudas, pero quizás eso le sentaba peor, la agobiaba más, por eso decidió quedarse donde estaba.
—Pude como... Empujar el agua. No sé si me explico —dijo Radne.
Todos los miembros de la tripulación se miraron unos a otros sin saber muy bien a qué se refería.
—Podrías intentarlo con el mar —dijo Nami. —Ya sabes separar las aguas o algo así.
Radne miró al mar con miedo, sabía que eso era imposible para ella. El mar es el ser más temible y bravo que ha conocido pero a su vez es un monstruo dormido que puede ser al mismo tiempo hermoso.
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Pirates & Mermaids |Monkey D. Luffy|
FanfictionEl sueño de Luffy es encontrar el One Piece y conventirse en el rey de los piratas. Radne ha vivido siempre en el mar. Sueña con algún día salir a la superficie y vivir aventuras fuera del agua. Un pirata y una sirena. ¿Qué podría salir mal? × luff...