Roma - [Supercorp AU /Kara G!P]

Capítulo 59: Sanguis et Gloria III

Obs.: Buenas, les traigo la última parte de esta mini maratón, espero que lo disfruten.

PARTE 3/3

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Pov. Op

El horizonte se hallaba amenazante de un rojo despertar, como un ineludible aviso de que la blanca nieve se tiñeria de rojo carmesí cuando el astro rey llegase a la cúspide de su posición, lo cual ocurriría en pocas minutos, lo que causaba que los corazones de líderes se vieran más desbordados por todo tipo de sentimientos.

— En que mente despojada de divinidad de minerva se le ocurre dar rienda libre a los deseos mezquinos de un rey destronado de su palabra? —despotricando palabras al aire mientras buscaba sosegar la incertidumbre con la bebida preferida por todo romano—

— Llama la calma a tu razón Sara, has escuchado las palabras de Lexa, ni Júpiter en persona la hubiera hecho desistir de sus planes, la conoces, tanto como cada una de nosotras. —intentando apaciguar las aguas turbulentas—

— La pelirroja tiene razón, no debemos llorar sobre leche derramada y tengamos fe en que nuestra general maximus volverá airosa de su misión, además no se encuentra sola, ha llevado consigo veinte de los más diestros en batalla para cuidar sus intereses. —ayudando en palabras a la labor deseada por la anterior —

SAR: ¿Hablas en serio? ¿Pretendes comparar un puñado de hombres con visitar la quijada de la bestia? —viéndose más alterada que apaciguada por las recientes declaraciones de sus iguales —

LEX: Comprendo tu sentir Sara, hubiera dado títulos y laureles para ser quien estuviera en esa reunión...hemos visto a muchos caer en esta campaña, pero te aseguro que como Apolo nos traerá un nuevo día, Kara volverá y cabalgara en el horizonte para ver otro destello de luz divina. —teniendo que interceder para que la calma llegase al pretorium—

SAR: En verdad espero que tus palabras conmueven los oídos de las parcas y las mismas se hagan realidad. —dejándose vencer en una de las sillas con el vaso medio vacío contemplando la luz tenue que una de las velas otorgaban dentro de la tienda de campaña—

NAT: Y al parecer así será...miren al horizonte y contemplen la llegada de un verdadero titán. —haciendo eco para que las presentes realizaron la misma acción, siendo la segunda al mando la primera en reaccionar y abandonar para recibir a los recién llegados—

LEX: En verdad tu padre divino tiene su ojo posado en ti, es bueno verte de vuelta con bien Kara. —observando como su amiga y superior abandonaba el lomo de su medio de trasporte para luego caminar a pasos seguros hacia sus generales y especialmente hacia su palabra y voluntad—

KAR: Gracias por permanecer firme y no ser presa de profundos deseos personales. —buscando un saludo fraternal que fue bien recibido—

— Debo escoger el momento para saciar el placer. —saludando con una media sonrisa en el rostro por la alegría y el alivio de ver a su amiga con bien—

SAR: ¿Cuáles fueron los términos acordados? —interviniendo en la conversación—

KAR: El rey germano, su reina y sus hombres no se someterán a un gobierno extranjero...por lo que honraremos a los caídos con sangre y muerte...preparen todo, levantaremos el campamento cuando Apolo se acerque al este del cielo, quiero un ágil paso, el lugar designado para la batalla será a las puertas del la montaña a la cual consideran el hogar de una de sus divinidades. —dando un panorama general de la audiencia atestiguada—