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— Zane, ¿harías los honores? —Preguntó Pixal, pasandole un control. Zane lo presiona y el Hydro Bounty aparece desde mar—. 

— ¿Y cómo has construido eso tan rápido? —Inquirió Jay—. 

— He estado trabajando en mi tiempo libre los últimos años. 

— ¡Es increíble, Pixal! —Dijo Wu asombrado—.

— Me enorgullece decir que es una de las naves más sofisticadas que he diseñado y prácticamente es insumergible.  

— ¿Sabes lo que pasa cuando llamas a una nave "insumergible" verdad? —Le preguntó Cole, y los chicos lo miraron para que lo corrigiera—. Que no se hunde, claro. 

— Esto es genial, Pixal. Lo que necesitábamos. —Dijo Lloyd luego de haberse subido a la cubierta del Hydro Bounty junto a los chicos—.

— ¿Pero qué tan seguros están de que el pulso submarino que vieron está causando que mis poderes se vuelvan locos? 

— 97% Positivo. —Afirmó Zane—.

— Eso es muy positivo. —Opinó Kai—.

— ¿Pero qué pasa si mis poderes se vuelven locos mientras estamos abajo? Tal vez no debería ir a esta misión. 

— Es exactamente por eso que necesitamos que vayas. Eres la Maestra del Agua. No hay nadie más conectado al mar que tu. —Le aseguró Jay tomando sus manos—.

— Sin embargo, lo que dices es cierto. Si prefieres quedarte aquí, con tu madre... —Comentó Wu—.

— No, No, No. Jay tiene razón. ¡Iré a empacar! —Gritó Nya, saltando del Hydro Bounty—. 

— Buena jugada Wu. —Le dijo Aemma. Zane, Pixal, Nya, Jay, Lloyd y Aemma fueron a empacar para embarcar el Hydro Bounty al anochecer. Caminaron por el muelle lentamente en forma de película, Jay le guiño el ojo a Nya y accidentalmente disparó su arma cayendo a los pies de Lloyd, esta se disparó sola rozándole el rostro a él—.

— ¡Jay! —Reprendió Nya—.

— Ah, lo siento. —Se subieron al Hydro Bounty y se sentaron en sus puestos en la sala de control—.

— ¡Todos preparados marineros! ¡La amarras, suéltenlas rápido! —Ordenó Zane—.

— ¿Por qué hablas así, Zane? —Inquirió Nya—. 

— Dejame adivinar. Descargaste miles de gigabytes de películas y novelas sobre marineros y piratas para prepararse para nuestro viaje. —Afirmó Pixal—.

— ¡Sí! También descargue musicales. ¡Ahora dejen de parlotear y suelten las amarras! ¡Ahora! —Los chicos encendieron las turbinas—. Mucho mejor. ¡Ahora, a toda máquina tripulación!  

— Navegación está lista. —Avisó Pixal—. 

— Motores listos. —Avisó Lloyd—.

— El sónar está listo. —Avisó Nya—.

— Ya hice la revisión de los motores. —Informó Aemma—.

— ¿Por qué revisaste los motores? —Preguntó Pixal confundida—.

— Sin ofender Pix, se que hiciste un gran trabajo, pero no quiero quedar a la deriva en el fondo del mar y ahogarme otra vez. 

— Lo siento, ¿que soy? —Preguntó Jay—.

— ¡¿Qué te pasa marinero?! ¡Estas al timón, el timón! —Gritó Zane—.

— ¡El timón está listo! 

Trust me ⅡDonde viven las historias. Descúbrelo ahora