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— ¿Estás meditando? —Le preguntó Lloyd a Aemma mientras se sienta en la cocina junto a ella—. Deja de hacerlo. Es aburrido.

— No estoy meditando. —Contestó—. Estoy tratando de conectar con Vhagar por la conexión telepática que hemos desarrollado.

— ¿Le sucedió algo? —Inquirió preocupado—.

— No. Pero ha pasado mucho tiempo con Kai y Cole. ¿Sueno como una madre preocupado? ¿Soy una madre preocupada? 

— Ah... si, luces y suenas como una. —Le toma de las manos y ambos se miran fijamente—. Él estará bien. Te lo prometo. —Se acercó lentamente a sus labios acariciándolos con dulzura estando apunto de plantar un beso cuando los demás entran charlando. Lloyd se levanta del asiento para dejar que los demás se sienten—.

— Bien, déjenme entender esto... —Habló Jay—. Kalmaar necesita dos amuletos para despertar esa gran serpiente Wojira, ¿y el ya tiene uno? 

— Correcto. —Respondió Benthomaar—. El amuleto de la ola. 

— ¿Y el segundo es el de la tormenta, el que está en la isla de los guardianes? 

— Sí. —Contestó Lloyd—. Será mejor que lleguemos ahí primero para que no le ponga las manos encima. 

— O tentáculos. —Le interrumpió Aemma—.

— O despertara a Wojira y destruirá el mundo de la superficie. —Prosiguió Maya—.

— ¿No veo como los amuletos despertaran a Wojira? ¿Cómo se vinculan? —Indago Zane—.

— Es muy raro, pero lo vimos. —Respondió Nya—. Wojira es una gran serpiente y tiene dos agujeros en la cabeza y los amuletos caben adentro.

— ¡¿Dentro de su cabeza?! —Vociferó Jay—. Que asco. 

— Y lo alimentan con electricidad. —Mencionó Maya—. Eso hizo que los poderes de Nya se volvieran loco... —El submarino se tambaleo por completo y todos fueron a la sala control—.

— Pixal, ¿que fue eso? —Preguntó Lloyd—.

— Es la tormenta eléctrica. Nos acercamos a la isla de los guardianes. Por favor sostenganse. Nos sumergiéremos para poder evitar la tormenta, pero experimentáremos un poco de turbulencia. —Una roca cae sobre el submarino haciendo que este se mueva bruscamente y jay caiga de su asiento—.  Obstáculo al frente, timón a dos grados.

— Timón a dos grados. —Replicó Nya presionando unos botones y el casco del Hydro Bounty chocó contra una roca y Jay sale expulsado el techo—. 

— ¡Ay por favor! 

— Jay, tu silla tiene un cinturón de seguridad. —Mencionó Nya—.

— ¿Ya llegamos? —Preguntó Jay—.

— Afirmativo. —Respondió Pixal—.

— Bueno este lugar me trae recuerdo. —Murmuró Aemma—. 

— ¿Como nuestra primera pelea de novios? —Inquirió Lloyd—. Eso es algo que me gustaría olvidar. 

— Si a mi también. —Todos se encaminaron hasta la escotilla y se detuvieron—.

— Benthomaar, los guardianes son algo... mmm... susceptibles. —Mencionó Nya—. Así que será mejor que solo nosotros hablemos. 

— Si, nos conocen. Somos amigos. —Añadió Jay—.

— Como digan. —Respondió Benthomaar. Jay abrió la escotilla asomando la cabeza y los guardianes le apuntaron con sus lanzas—.

—  Oigan, chicos. Soy yo, ¿recuerdan? ¿Jay el regalo? 

Trust me ⅡDonde viven las historias. Descúbrelo ahora