Trust me Ⅱ

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— ¿Cómo alguien podría mover tanta Vengestone por la ciudad? —Inquirió Cole mientras veía la pantalla de la base en el monasterio junto al resto del equipo.

— Te sorprenderías cuanto pueden transportar si conocen cada rincón de Ninjago —Contestó Aemma cruzada de brazos viendo como Vhagar se acomodaba en su cuello.

— No por aire —Respondió Zane—, sería detectada por el tráfico aéreo. ¿Bajo tierra, quizá? 

— Ya se los dije —Habló Lloyd—, Serpentine dijo que nadie ha usado los túneles subterráneos. Lo sabrían.    

— Pero se mueven de alguna forma —Dijo Cole—. No estamos viendo todo. Comencemos con lo que sabemos. 

— Ah... ¡Llevamos en esto horas! —Se quejó Kai, claramente alterado—. ¡Solo volvemos a lo mismo! 

— Estas cosas llevan tiempo, Kai —Aclaró Aemma.

— ¿Alguna idea, Jay? —Le preguntó Lloyd y todos le observaron junto a una mesa con vasos llenos de agua.

— ¿Jay? Necesitamos que te concentres, amigo —Incitó Cole, pero él no contestó.

— ¡Jay! —Bramó Kai haciendo que reaccione.

— Oye Kai, no tienes que gritar, estoy justo aquí. 

— ¿Ideas sobre la Vengestone? ¿Sobre él comprador? ¿Cómo la mueven? ¿Algo? —Inquirió Cole.

— No. 

— Necesitaremos algo más de esfuerzo —Insistió.

— ¿Cual es el punto? —Espetó Jay.

— ¿Disculpa? —Inquirió Lloyd.

— Lloyd, dijiste que Nya no querría que nos rindiéramos. Que nos patearia el trasero y nos pondría a trabajar. Tienes razón. Pero creo que olvidaste algo. No fuimos un verdadero equipo hasta que Nya se unió. Y aunque no nos hayamos dado cuenta, ella era el pegamento que nos mantenía unidos. 

— ¿Qué quieres decir? —Preguntó Cole.

— Que no creo que podamos hacer esto sin ella. 

— ¡Te comportas como si fueras el único que la extraña! —Le reclamó Kai—. Todos lo hacemos. ¡Pero al menos intentamos ayudar en vez de estar tristes sin hacer nada!

— Kai —Recrimino Aemma.

— ¡Oye! Tú me llamaste a mi. ¡Yo no pedí estar aquí! 

— Jay —Le habló Aemma al ver que Kai se acercaba a él para discutir, Lloyd al verla preocupada se acercó a ambos alejándolos del otro.

— Creo que todos estamos exaltados. Tomemos un descanso. 

— ¿Y entonces eso que lograra? Ya sabemos lo que hay que saber. La Vengestone sería localizada si hubiera sido transportada por aire o por los túneles conocidos... —Masculló Jay mirando una caja de pizza.

— ¿Jay? ¿Tienes alguna idea? —Preguntó Cole.

— ¿O ya te volviste loco? —Añadió Kai.

— Yo... quizá tenga algo. Ah, Zane, ¿puedes poner el mapa de los túneles de la ciudad? —Él asintió con la cabeza y mostró el mapa por la pantalla.

— ¿Qué estás buscando Jay? —Le preguntó Aemma.

— ¡Esa es! —Gritó Jay apuntando a una parte del mapa—. Tenemos que ir ahí. 

— ¿Estás seguro? —Cuestionó Lloyd y Jay asintió con la cabeza—. Bien, todos vayan a cambiarse nos iremos en 20 minutos.

Los Ninjas subieron por el ascensor a cambiar sus vestimenta de civiles para ir a ponerse sus trajes de Ninja.