Capítulo 17: Buenas y malas

66 8 0
                                    

Narrador omnisciente


Muchas cosas sucedieron esa misma noche al simultáneo. Mientras Jimin y Jungkook devoraban sus bocas ávidamente en algún oscuro rincón, Taehyung y Yoongi no sabían por donde comenzar su conversación. Ambos se miraban de manera nerviosa y tímida, habiendo perdido la poca valentía que les había impulsado hasta el momento, compartiendo un silencio de lo más incómodo. 

Justo cuando Tae se disponía a romper la tensión les interrumpió un apuesto muchacho, acercándose a Yoongi y susurrándole algo al oído. Tae volvió a malinterpretar todo, se dio media vuelta y comenzó a caminar apresurado buscando la salida, sintiendose humillado por la situación.

-Ve por él idiota- Jin empujó a su hermano, comenzaba a intuir lo que pasaba. De los tres hermanos los que menos se parecían entre sí eran Yoongi y él, ante los ojos de un desconocido eran dos personas random tratándose con confianza y complicidad, una escena que se podía interpretar de muchas formas. Iugh, la posibilidad de que alguien pensara que su hermanito era su amante le revolvió las tripas, más le valía a Yoon aclarar los tantos, ya era hora de que alguno de los dos idiotas le diera un cuñado decente.

Yoongi alcanzó a Tae cuando estaba por llegar al escondite de su amigo, sin saberlo claro. Lo tomó por el brazo frenándolo abruptamente, si se demoraba dos segundos más en alcanzarlo iban a terminar presenciando una escena caliente que ya se estaba desarrollando en el balcón oscuro.

-¿Qué carajo te pasa?- Tae estaba entre la furia y el llanto, no se decidía aún qué sentir

-Lo mismo digo Taehyung, me haces sentir miles de cosas para luego desaparecer, me das ilusiones y vuelves a tener la intención de escaparte? Si esto es un juego, yo no quiero jugar- La expresión de Yoongi era conmovedora, sus palabras se sentían sinceras

-Yo no quiero jugar con nadie Yoongi, pero es la segunda vez que te veo tonteando con alguien más y eso me hiere- Listo, lo dijo

-Tonteando con...- Yoongi dejó sus palabras en el aire, pensando en lo que había dicho el contrario -¿Tonteando con mi hermano?-

-Ese no es tu hermano, no soy tonto. Tu hermano estaba besándose con mi Jimin la noche en la que los vi juntos la última vez, no se puede estar en dos lugares a la vez-

-Si, Jungkook estaba besándose con tu amigo aquella noche, Jin por otra parte estaba conmigo intentando buscar a la loca de la ex de Kook para sacársela de encima de alguna manera-

-Tienes dos hermanos- sentenció.

-Tengo dos hermanos, y ya te lo había dicho antes Tae- Yoongi había pasado de la tristeza a la indignación rápidamente, se sentía acusado injustamente.

-Yoongi... No quiero justificarme ni nada parecido, pero sentí tanta conexión contigo que me dio miedo, y pensarte con alguien más solo alimentó ese temor. Perdón, fui un tonto, entiendo si no quieres nada más conmigo, no comenzamos nada siquiera y yo ya lo estaba terminando- Lágrimas comenzaron a bajar del rostro de Tae, Yoongi las quitó dulcemente de sus mejillas, acariciando su rostro en el proceso. Se acercó lentamente y depositó un beso en sus labios, tierno, dulce y sincero.

-Quiero todo contigo, precioso- La molestia que había sentido se disipó con facilidad al escuchar las palabras sinceras del contrario, un malentendido no tenía por qué desmotivarlo a darle una oportunidad a sus sentimientos. Hacía mucho tiempo que a Yoongi no se le movía el piso de esa manera y sabía que no podía dejar pasar esa oportunidad.

Se tomaron de la mano dirigiéndose ahora sí a la salida, poniendose de acuerdo con una mirada. Ambos querían un lugar más tranquilo para profundizar su charla y sus caricias.

Mientras la nueva parejita discutía con las emociones a flor de piel, Jimin y Jungkook continuaban su apasionado encuentro.


Pov: Jungkook


Cada segundo que pasaba me atrevía a tocar un poco más al ángel que tenía entre mis brazos, temía que si lo soltaba se fuera a desvanecer. Mis manos ya habían encontrado su camino debajo de su camisa, apretando y acariciando su tierna y suave piel a mi antojo. Jimin era tan receptivo a mi tacto que se deshacía en gemidos con cada pequeña caricia, nuestros cuerpos estaban totalmente pegados entre sí y nuestras erecciones se rozaban deliciosamente, a punto de estallar. Mi rubio seguía aferrado a mí con sus manitos, apretando rítmicamente la tela de mi camisa cada vez que encontraba algún punto erógeno que lo hiciera suspirar. Mi boca se había aventurado a trazar un camino de besos por su mandíbula, llegando a chupar y morder su cuello. El pañuelo que envolvía seductoramente su garganta me estorbaba, por lo que quise desatarlo. Me alejé un poco entre pequeños soniditos de protesta de mi acompañante.

En ese momento chico movió su mano hacia el bolsillo de mi saco y tomó el pañuelo rosado que yo seguía usando como accesorio.

-También tienes mi pañuelo- Exclamó risueño

De repente mi cabeza iba a mil por hora ¿Cómo que su pañuelo? Era un ítem que había encontrado olvidado dentro de mi casa

–¿Has estado en mi casa? - Me estaba comenzando a enfadar, miles de posibilidades cruzaban mi mente.

-Si, pero- No lo dejé terminar de hablar, me alejé bruscamente de su tacto y negué con mi cabeza. ¿Por qué siempre se me acercaban los psicópatas? Yo ansiaba reencontrarme con este chico, pero nunca me atrevería a acosarlo en su hogar, era un límite que no se debía cruzar. No me interesaba siquiera escuchar su intento de explicación, ya había sido acaramelado con palabras falsas durante mi tiempo de relación con Lilly, sabía que lo mejor era cortar todo de raíz.

-Eres despreciable- Lo dejé en la oscuridad que nos refugiaba, creí ver una lágrima deslizándose por su mejilla pero intenté no prestarle atención, estaba determinado a que no me sucediera lo de Lilly una vez más y ese tipo de conducta era tan similar a la de mi ex que no pude sentir otra cosa más que rechazo total hacia su persona. Sus manos aún se aferraban a mi camisa, por lo que lo tomé de las muñecas y lo alejé con un poco de brusquedad. Me retiré del lugar sin mirar atrás, sin buscar a mis hermanos, salí hecho una furia solo pudiendo pensar en lo ingenuo que había sido por caer nuevamente por alguien que podría hacer de mi vida un infierno...

Imantado a ti - Kookmin -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora