Hermanitos? Ya no mas.

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Aunque el amor por parte de Julieta y Marcos se veia confuso y complicado habia otra parte que quizas tan mal no la estaba pasando.

Esa parte tenia caracteristicas bastantes significativas, como que los dos rubios. Exactamente, se trata de Ignacio Castañares y Constanza Romero quienes, tras la salida de Alexis y el distanciamiento con Lucila, estaban mas juntos que nunca.
El viernes del gran problema ellos tomaron un tiempo y se escabulleron al cuarto de mujeres pero no hicieron nada malo en realidad se dedicaron a hablar.

- Que noche larga. - Dijo el rubio tirandose a la cama de la rubia.

- Ni me lo digas, estoy cansada de que Alexis me este mirando todo el tiempo. - Diria sentandose en uno de los espacios vacios de su cama cerca del rostro del chico.

- No le des bola, yo hago eso con Lucila. Igual no es lo mismo obvio. - Se encogio de hombros.

- Si no se, no puedo negar que algo de miedo me da pero ta. Dentro de todo no somos muy diferentes aunque me disguste. - Diria terminando con un suspiro, no mentia y ella lo sabia.

- Tranqui que no te de miedo, no te va a pasar nada. No creo que el Cone se juege el irse de la casa por eso. - Diria acomodandose un poco mientras ponia su cabeza encima de las piernas de la de ojos claros.

- Me alegra tenerte aca, literal me das mucha tranquilidad. -  Diria acariciando el pelo del rubio con una leve sonrisa en el rostro.

- Te aseguro que vos tambien. Mucha. - Diria compartiendo la sonrisa.

Apartir quedaron en un silencio tranquilo, en la misma posicion, por un rato. Ambos estaban en situaciones parecidas, salian de una "relacion" y les hacia falta alguien que les de esa tranquilidad y dentro de todo amor. Tan asi que sin darse cuenta ya estaban besandose en esa cama, no era de una forma simplemente sexual, era un beso tranquilo pero apasionante.

Los labios se separaron y Nacho apunto al cuello de la chica con besos y chupones los cuales dejaria marcas, esta daba leves suspiros hasta que llego su momento de contraatacar pero esto no duro mucho ya que unos sonidos se escucharon desde afuera.

-Co para. - Dijo entre suspiros el chico.

- Que paso? - pregunto la correntina.

- Se escucha algo afuera. -

- Bueno vamos a ver entonces.- Y eso eso se propusieron a hacer, se dirigieron silenciosamente hacia la puerta. Ahi se oian voces, cuando se asomaron hacia el pasillo lograron divisar a Marcos y Julieta charlando, no parecian felices, no duro mucho hasta que el se fue y ella no pudo evitar llorar, cuando vieron que Marcos volvia rapidamente se escondieron.

- Ay la puta madre, que habra pasado? - Preguntaba Constanza mientras se sentaba en la cama.

- No tengo idea pero no tiene pinta de algo bueno. -

- Tengo que ir a hablar con Ju, necesito saber si esta bien. - Dijo para intentar salir del cuarto pero fue detenida por el rubio. - Nacho soltame. -

- Quedate aca, no es el mejor momento, estan las dos con alcohol en sangre y hay que dejarla un tiempo. - Decia serio el rubio, a lo que Romero solo se mantuvo en suspirar y volver a sentarse.

- Si vos decis. Espero que no haya pasado algo muy malo. - Diria tirandose en la cama el rubio.

- Mañana lo sabremos, espero lo mismo. - Soltaria para recostarse a su lado. A partir de eso hubo un largo silencio donde ambos miraban al techo.

- Co. -

- Que? -

- Que somos? - Pregunto el rubio.

𝓛𝓸 𝓮𝓼𝓽𝓸𝔂 𝓲𝓷𝓽𝓮𝓷𝓽𝓪𝓷𝓭𝓸 - marculiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora