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28 de Agosto, 2023
16:00

Renata junto sus apuntes y se dirigío al jardín de la casa donde actualmente vive para encontrarse a su hermana tonteando junto a Marc, su novio.

Baby Ru como la apodan Gemma y sus padres rodó los ojos ya que ver aquella imagen provocaba arcadas en ella aunque la flamante pareja no fueran los culpables de que su novio le haya sido infiel.

Aún así necesitaba tiempo para poder superar aquella decepción.

Gemma al ver a su hermana varios metros detrás de ellos levanto su mano invitandola a acercarse.

Marc, quien se encontraba al lado de Gemma se levantó de inmediato en cuanto noto la presencia de Renata allí junto a ellos.

Baby Ru, se gano el corazón del ocho veces campeón del mundo de manera muy fácil provocando que este la aprecie demasiado.

Renata cerró los ojos y se abrazo a Marc en cuanto este lo hizo, la realidad es que ella también lo apreciaba.

-¿Alguna vez paras? -pregunto marc al separarse y ver sus apuntes- Apenas acabas de llegar de la universidad -renata suspiro-

El tenía razón, hacía tan solo minutos había llegado y lejos de poder tirarse sobre su cama a escuchar música, ver tiktok, grabar contenido para el mismo o hacer los bailes de cada trend como antes solía hacerlo debía ponerse a estudiar ya que en dos días tendría un examen importante.

-Creo que debes darte un respiro Ru -hablo esta vez gemma- De verdad, vives encerrada dentro de tu habitación con los apuntes. Entiendo que es importante para ti este examen, pero no te exijas demasiado. ¿Vale?

Aquellas palabras de su hermana fueron más que suficientes para dejar sus apuntes a un lado y sentarse a la par de la pareja quienes disfrutaban del sol al borde de la piscina.

-Vale, lo consiguieron -habló renata por primera vez- ¿Que hablaban? -pregunto- Además de besuquearse a cada rato -agregó provocando que rieran-

-Pues que este finde semana es el Gran Premio de Calatunya. El mundial irá a Barcelona y me gustaría que vinieses -propuso marc con una sonrisa-
-¿Otra vez? Parece que aún no te ha quedado claro Marc, no iré, no iré nunca tío. No me gusta tu mundillo, lo siento de verdad -aquellas palabras lastimaron al piloto pero al final fingió una sonrisa mientras que asentía dandose por vencido-

Pero Gemma no iba a dejar que su hermana rechazara por decima vez la invitación de Marc, no cuando se trata de algo por el cual mucha gente moriría por ver y vivir.

-Renata, me escuchas. ¿Vale? Iras, no importa si no quieres, iras de todas formas -habló demandante sorprendiendo a su hermana menor- Que ya esta, no puedes seguir negandote.
-¿Me obligaras? -preguntó renata sintiendo enfado por la autoridad con la cual le acababa de hablar su hermana-
-Esta en ti, ir por las buenas o por las malas -soltó ahora gemma esbozando una sonrisa de lado-
-Vale, vale no te enojes con Gemma -hablo marc a la defensiva al ver la cara de renata- Pero mírale el lado bueno, saldrás cuatro días de aquí -habló señalando el lugar- y también de Madrid. Conocerás mucha gente e incluso puedes conocer a alguien que te interese -aquellas palabras fueron entusiastas de parte del campeón del mundo pero gemma supo que solo enfadarian más a su hermana-
-¡Que no! ¡Que no quiero conocer a nadie! Eres muy tonto al creer que algún loco de las motos como tú podría gustarme -solto antes de levantarse y tomar sus apuntes para salir corriendo dirigiendose dentro-

Subió las escaleras de forma rapida mientras sentía como comenzaba a agobiarse y acto seguido las lágrimas brotaban de sus ojos.

Todo estaba siendo muy difícil para ella, empezando por el hecho de abandonar Murcia para mudarse a Madrid.

¿DESTINO O CASUALIDAD? | PEDRO ACOSTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora