Pedro Acosta, el piloto español de diecinueve años participe de la categoría de Moto2 en el Campeonato Mundial de Motociclismo (MotoGP).
Renata Pinto de dieciochos años quien decide mudarse junto a su hermana para comenzar una nueva vida en Madrid...
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VALENCIA GP: PARTE 6
27 de Noviembre, 2023 📍Circuit Ricardo Tormo 10:50
RENATA
Abrí los ojos después de repetidas veces sentir como mi móvil el cual se encuentra sobre la mesita de luz que se sitúa al lado de la cama de Pedro no deja de vibrar.
Sonrió al sentir como los brazos de Pedro rodean con fuerza mi cintura, casi impidiendo que pueda moverme por lo que haciendo un esfuerzo estiro uno de mis brazos para tomarlo y ver que se trataba de una llamada perdida de mi hermana.
Gemm💖:Ru. ¿Estaís despiertos ya? En nada iremos al circuito. ¿Desayunamos juntas o lo haces con Pedro?
Mire la hora en la que había escrito el último mensaje que me envió para darme cuenta de que había sido hace más de media hora y que tanto a Pedro como a mi se nos fue de la mano la situación, iban a ser casi las once de la mañana.
-Gemm perdón, me acabo de despertar. Iré al motorhome de Marc en cuanto Pedro despierte.
Luego de escribir aquel mensaje volví a dejar el móvil en su lugar, con cuidado, sin intenciones de despertarlo aún a pesar de que ya sea tarde me gire para encontrarme con el rostro de Pedro completamente relajado.
Fue imposible no sonreír al verlo de aquella forma, es mi primer despertar junto a él y admito que siento como si todo fuese un sueño, aún no puedo creer lo que vivimos anoche.
Con una de mis manos recorrí su abdomen acariciandolo lentamente mientras que su pecho subía y bajaba siguiendo el ritmo de su respiración.
No pude aguantar la tentación de acercarme a el para depositar un beso suave en sus labios que me hizo saber que estaba despierto al sentir como sus manos apretaron mi cintura y luego se movieron hasta el borde de la camiseta que tengo puesta colándose debajo de ella.
-Pedro -murmure sintiendo como su mano acariciaba mi piel y el sonreía pegado a mis labios- debemos levantarnos, es tarde -hablé sintiendo como mi cuerpo comenzaba a acolorarse cuando su mano rozo mi intimidad y sus labios tomaron con posesión los míos tomandome por sorpresa-
No dude en responder aquel beso con la misma intensidad con la que el tomo mis labios mientras mis manos ahora se movían por su espalda y el, provocandome jugaba con sus dedos sobre la tela de mi braga robandome más de un gemido.
Estuvimos besándonos durante varios minutos hasta que decidió abrir los ojos y sonreír antes de volver a dejar un beso corto en mis labios.
-Buen día -susurró con la voz algo ronca- -Buen día -respondí repitiendo sus palabras acariciando su pelo con ambas manos-
Me acerque a él y deposite un beso sobre su nariz lo que nos hizo sonreír.
-Este es el mejor despertar en mucho tiempo -confesó mientras su mano se deslizaba por una de mis piernas acariciandome- ¿Todo contigo será siempre así de increíble? -aquella pregunta me desbordó de emoción y felicidad- -No lose, solo si quieres que siga siendo yo quien despierte a tu lado -respondí intentando vacilarlo- -Claro que quiero, lo quiero todo contigo Maria Renata.
