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Jacob admiró a su impronta a lo lejos, ella se encontraba vistiendo un traje de baño mientras descansaba plácidamente en la arena, al lado de Megan y Rachel.
No pudo evitar pensar en lo guapa que se veía, su cabello pelirrojo parecía una candente llamara a la luz del radiante sol de verano, su piel lucía apenas bronceada, alejándose de su típico color pálido y su vientre parecía haber crecido un poco más.
— Deja de mirarla, acosador.— Dijo Quil empujándolo en broma, aquello hizo reír a toda la manada.
Leah nadaba junto a su flamante nueva impronta, sí, la loba había dejado su impronta en un joven maestro de matemáticas de la preparatoria.
Seth había, nuevamente, reprobado la materia aquel semestre y mientras Sue se encontraba de crucero junto al Jefe Swan, su nuevo esposo, ella había asistido a la reunión, grande fue la sorpresa cuando Seth tuvo que ayudarla a salir del salón antes de que saltara sobre él.
Esta era su segunda cita, luego de una fatídica y muy tensa primera cita en la que Josh se debatía si debía mantenerse profesional ante la joven o si debía lanzarse al precipicio ante los encantos de la morena.
Clarissa había tenido la fantástica idea de que verla en traje de baño ayudaría a romper el hielo.
—¡Chicos!— Llamó Clarissa con urgencia, la manada corrió hacia ella con el rostro preocupado.
— ¿Te sientes mal?
— ¡Ah? ¡no, no!— Dijo con una sonrisa inocente.—Es que... tengo una idea.
—¿Idea?
— Sí, idea.— Sonrió besando el mentón de su impronta, quien se había sentado detrás suyo para que pudiera descansar la espalda en su pecho.
—¿Cuál?
— Miren a Leah y Josh.— Todos voltearon ante los mencionados.
El chico había entrado al agua con todo y camiseta, sí, no se había atrevido luego de ver a la manada.
¿Quién lo haría? Los chicos, desde los más jóvenes, eran enormes masas de músculos con mirada seria y vigilante.
Leah se veía encantadora con un traje de baño de color rojo, sugerencia de las chicas, aún así el chico parecía tímido y se negaba a acercarse nadando lejos de ella.
—¿Qué tiene Leah?
— Él la está evitando.— Dijo Megan.— queremos que él la vea.
— Pero no es ciego.— Dijo Paul con el ceño fruncido.
— Idiota.— Dijo su impronta.— Que la vea como una mujer, no como la hermana mayor de Seth.
