Dan no estaba del todo seguro de porqué su cuerpo estaba actuando casi por su propia cuenta.
Estaba sentado en el regazo del noble, ambas piernas descansando a cada costado de Jaekyung, pero no estaba pensando en nada que no fueran sus labios sobre los suyos. No era la primera vez que se besaban, pero era diferente a todas las anteriores.
Tal vez era la tenue luz de la vela o las gotas de lluvia golpeando el techo de la carpa, pero se sentía atraído por Jaekyung de una manera que realmente no entendía. Quizás fue el masaje o sus propios deseos ocultos que ha estado reteniendo durante semanas... Era un misterio, pero nada en lo que quisiera pensar en este momento. La mano de Jaekyung se posó en su espalda, sintiendo como recostaba suavemente su cuerpo hasta tocar la cama.
Jaekyung fue un poco descuidado con sus besos al principio, pero fue firme con sus tacto, bajando estos hasta su barbilla y cuello, disfrutando de los suaves ruidos que salían de la boca de Dan. Dan hizo su cabeza hacia atrás para darle un mejor acceso a su cuello, sintiendo que lentamente le era arrebatada su camisa, dejando su pecho expuesto para el deleite del noble.
Los besos húmedos bajaron hasta sus clavículas, sintiendo un pequeño pellizco ocasional en esa zona. Dan miró hacia abajo desde su posición, encontrándose con un noble que tenía su mirada puesta en él mientras chupaba su piel, saboreándola.
―¿Q-qué está haciendo? Nos van a escuchar...
Jaekyung se separó con un chasquido de su boca, lamiendo la fresca marca roja en la piel del médico. Hizo otra, moviendo sus labios a lo largo de sus clavículas dejando mordiscos y chupetones a su paso, disfrutando los jadeos y gemidos amortiguados que Dan ahogaba en su propio puño. Jaekyung continuó mirando a Dan desde su posición, sonriendo cuando finalmente separó sus labios de su pectoral.
―Haciéndote sentir bien, doctor.
Una mancha escarlata recorrió el rostro de Dan, mirando como Jaekyung besaba su pecho desnudo, acercándose lentamente al centro de uno de estos. Mientras repartía besos por toda esa zona, los latidos del corazón de Dan eran tan fuertes que Jaekyung podría haber jurado que sus labios los sentían, sonriendo por dentro mientras se acercaba a la delicada piel del pezón derecho del médico.
Lo lamió suavemente, esperando escuchar más de sus gemidos mientras lentamente comenzaba a chuparlo. Su lengua saboreó cada centímetro de la delicada piel de Dan, apretando el músculo de boxeador* con fuerza para mantenerlo en su lugar. Lamió círculos alrededor de su areola, escuchando los gemidos de Dan intensificarse lamida tras lamida, prestando mucha atención al botón que parecía llamarlo por su nombre.
Mordió su pezón lentamente, chupándolo y lamiéndolo mientras sentía algo presionando contra su cintura, mirando hacia abajo por un momento sólo para encontrar el bulto de Dan debajo de sus pantalones, rogando por ser liberado.
—¿Esto es todo lo que hizo falta, doctor? Mierda, debería haber hecho esto antes...
―Cállate... y continúa... ―gimió Dan.
Jaekyung sonrió y miró a Dan una vez más, pronto centrando su atención en el otro pezón. Lo metió en su boca con un movimiento de succión que estaba volviendo loco a Dan, en lo que las lágrimas de placer llenaban sus ojos. Sus sentidos estaban al máximo, abrumándolo de tal manera que tuvo que agarrarse a lo más cercano que tenía, enredando sus dedos en el cabello de Jaekyung en el proceso y tirando de él lentamente mientras gemidos salían por su boca. Los ojos del noble se llenaron de lujuria ante las reacciones de su doctor, mirándolo con una amplia sonrisa en su rostro.
Continuó su labor mientras sus manos viajaban hasta los pantalones de Dan, quitándoselos lentamente mientras el médico dejaba escapar un suspiro de alivio al sentir la presión de su entrepierna liberarse. Dan pronto miró al noble, apresurándose a quitarle los pantalones cuando de repente se dio cuenta de algo, quedándose quieto entre jadeos mientras lo miraba fijo.
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Amor Atemporal || Jinx (Manhwa) || TRADUCCIÓN
FanfictionHabiendo aparecido en una época a la que no pertenece, Kim Dan no está preparado para la tarea que le ha sido encomendada para evitar una muerte segura: Debe encargarse del demonio que vive dentro del joven Noble Joo Jaekyung, por más poco ortodoxo...