Debo confesar lo afortunados que son aquellos que en medio de la soledad se encuentran, se acompañan, se cuidan y se tienen.
Qué inteligentes los que sin egos ni prejuicios se buscan, se procuran, se alientan y se quieren.
Qué bendecidos los que en medio de tanta gente pueden reencontrarse y entregarse todo lo bello que tiene por dentro.
Todos somos una vez en la vida, no hay marcha atrás. Por eso no gastes letras en quien no sabe leer; sino en quien encuentra en ellas el significado de su existencia, no uses palabras en quien no las escucha; sino en quien encuentra su refugio en ellas, no busques afecto en quien no lo conoce; sino en quien te lo demuestra día a día.
Somos una vez en esta vida, así que no te pierdas buscando a alguien que te ame a ratos, busca a alguien que ame tú alma a pesar del desastre que lleves por dentro.
Y cuando encuentras a esa persona es que te das cuenta de que valió la pena toda la demora. Es justo ahí, en ese momento cuando te das cuenta de que las cosas solo ocurren una vez, que todo pasa por algo.
Qué milagro tan lindo y elevado es el amor, para aquellos que si lo entienden.
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Noches en Saturno
Teen FictionComienzo a olvidar detalles, palabras y acontecimientos, que son reemplazados por información ficticia creada por mi propio cerebro mucho más dolorosa que la real. Mi intento por olvidarlo todo y pasar página se está volviendo en mi contra, arrastrá...
