Noches en Saturno

Amar

El amor duele, joder sí que duele.

Amar significa partirse en dos.
El yo, pasa a ser nosotros.
El tú, pasa a veces, a ser prioridad.
El yo, en ocasiones casi se olvida.

Asusta lo sé, pero es algo que no podemos controlar.

Pero, aunque de miedo, todos sabemos que amar es algo completamente irremplazable.

Todos queremos ser amados en esta vida, aunque en ocasiones todos renunciamos al amor, porque nos han hecho daño, porque estamos hartos de pasarlo mal.

Amar es confianza, pero, ¿qué es la confianza? Es el poder que le das a alguien de poder lastimarte, se que es un poco contradictorio porque; ¿por qué harías algo así? Pues la respuesta es muy sencilla; porque estas completamente seguro de que esa persona nunca lo haría.

A mí, me duele sobre todo el que ama demasiado porque no sabe amarse a sí mismo, el que lo da todo sin saber a quien, el que es indiferente y le hace creer cosas que no son al otro.

Sí, ahora me diréis que este texto es muy sombrío, que hay que tener esperanza.

Y os responderé que sí, que por supuesto, que igual que la Fe mueve montañas, el amor mueve universos.

Yo siempre creeré en él, hasta cuando no crea en mí porque hubo alguien que me hizo volver a creer y me enseñó lo que es amar completamente a alguien, sin barreras, sin cadenas y sin ataduras.