La caza de Eros

26- Nico

—Saldré ahora —informó Bianca mientras se colgaba su mochila.
—Cuidate —pedí jugando con mis manos.

Trás la llegada de las cazadoras y la desaparición de Apolo, sabíamos que esto tenía que iniciar.

—Lo haré, igual tú —dijo sacudiendo mi cabello para subir a la van con las cazadoras.
—Estará bien Nico —dijo Percy y me giré para ver al chico que venía con los chicos de la próxima misión.
—Sí —dije mirando a los chicos que su cara me decía lo nervioso que estaban, excepto Annabeth que tenía experiencia en esto.
—Mantenme informada Percy y si sale más de la profecía —dijo Annabeth.

La chica había descifrado  que el laberinto de la profecía era el de Lemnos, que hasta hoy creía que era un mito. Y también Rachel había dibujado una liria. Por lo tanto creía que era el objeto que debían buscar.

—¿Estás segura de esto? —cuestioné.
—Sí —dijo sin más y miró a Percy—. Estoy segura que esta liria nos ayudará en la guerra puede encantar a los monstruos o incluso si Apolo la toca hará que los dioses ayuden.
—¿Y por qué Apolo nos ayudaría en primer lugar? —cuestionó Jason.
—Porque está enamorado de la hermana de Percy —dijo Annabeth.
—Esa es información innecesaria —exclamé.
—Bueno, suerte en la búsqueda chicos. Nosotros sarparemos en un par de horas —dijo Percy y se despidió de Leo.

Cuando los cuatro chicos del laberinto de fueron, caminamos colina abajo. Percy iba pensativo y sabía que se preocupaba por Andy.

—¿Qué piensas? —cuestioné.
—Eros dijo que yo también tendría una prueba respecto al amor —dijo—. Nunca me he puesto a profundizar sobre ese tema o mis emociones, no sé si estaré listo cuando llegue el momento.
—Lo estarás, siempre sabes que hacer y esto no será la excepción aparte no estás enamorado —intenté bromear y él me sonrió.
—Es cierto, tal vez ni siquiera hable de un amor romántico —dijo.

Miré al frente dejando de ver al chico y a cambio pude ver a su hermana que estaba tomando su maleta y amenazaba a Luke.

—Esto no es un juego, no me interesa si estás rodeado de diez mil monstruos—le apuntó —. Tienes prohibido morirte Castellan.
—Creo que me queda claro —dijo riendo.
—¿Listos?
—Eso creo —respondió Luke y pude ver un dije diferente en la chica, era un sol.
—Esperaremos unas horas a ver si salen otras partes de la profecía y luego nos vamos —informó Percy.

Me fuí al comedor para conseguir algo de comer, ya que eran las cuatro de la mañana y todos los semidioses dormían. Y el comedor así era más cómodo.

—Te recomiendo los panqueques —dijo Percy y yo reí. El ojiverde se sentó y con él trajo panqueques de moras.
—La verdad no tengo mucha hambre, pero aquí es tranquilo.
—Tienes que comer algo —dijo partiendo el panque con los cubiertos y animandome a comer llevando el tenedor a mi boca.
—Tengo manos Percy.
—Lo sé —dijo, abrí para recibir la comida y sonrió satisfecho.
—Percy —hablé y él me miró —. Cuando desapareciste encontré otro campamento de semidioses, prometí no decir nada por seguridad de ambos campamentos—Jugué con mis anillos nervioso—. Pero creo que si se viene una guerra podemos apoyarnos.
—Vaya —hizo una pausa analizando la información—. Gracias por decirme, sí creo que será bueno apoyarnos.
—Es un campamento diferente para empezar ahí tienen las versiones romanas de los dioses, y tienen una vida —dije y recordé lo agradable que fue estar ahí. Aunque no quería una vida si no era con él, por eso regrese aquí.
—Tal vez luego puedas darme un tour —dijo sonriendo.
—Claro.

El tiempo pasó y no salió nada más así que decidimos irnos de una vez.

—Manda un mensaje iris si sale algo.
—Claro Percy —dijo Rachel abrazando al chico.
—Andando —dijo Andy jalando a su hermano para liberarlo del abrazo.

Subimos al yate e iniciamos la busqueda del cetro de la muerte, objeto que perteneció a mi padre siglos atrás hasta que quedó perdido en el mar por una discusión de dioses. La leyenda decía que solo la unión de los elegidos podría recuperarlo. Así que esperaba que alguno de nosotros sea esos porque lo necesitábamos al parecer.

Percy y Andy navegaron el barco buscando coordenadas.

—¿Sabes algo de Apolo y Andy? —cuestionó Luke en un susurro.
—Solo que Percy sospecha que están enamorados —no iba mentirle, no sería justo para él.
—Era de esperarse.
—Hey, pero ustedes conectan muy bien, no te des por vencido.
—No lo haré, tuvieron algo está bien.
—Intenta acercarte más ahora que no está el dios.
—Opino lo mismo de ti, Percy sigue soltero ¿Por qué será?
—Porque no le interesa nada del amor —dije mirando al chico que hablaba con su hermana.
—O nadie de su interes se le ha declarado.

La noche llegó y fuimos a la parte baja del yate para poder descansar. Andy ya había montado su espacio y estaba en una de las camas leyendo junto a Luke. El chico había seguido mi consejo.

Andy estaba recostada en su hombro mientras se deleitaba con libros griegos sobre el cetro y bueno Luke fingía leer ya que solo la admiraba.  Dejé mis cosas en la otra cama y decidí igual seguir su consejo, subí las escaleras para buscar al sirenito.

Percy estaba en el asiento de piloto secando su cabello, se había bañado. Me acerqué notando varios mapas con posibles coordenadas de nuestro objetivo.

—Hola —saludó tomando su mochila y sacando un suéter azul con el logo el campamento.
—Hola ¿Cómo estás? —me senté a su lado mirando el cielo nocturno.
—Pensando en el lugar que me contaste, Nico quiero una vida fuera de estás profecías —dijo, su voz sonó cansada.
—Lo entiendo, igual desearía tener un descanso de esto.
—Si no fueras un semidios ¿Qué crees que serías ahora? —cuestionó.
—Bueno, no lo sé supongo que estaría en la escuela siendo un marginado y amante del esgrima o algo así —dije provocando que sonriera.
—Sería marginado contigo —Yo reí
—Claramente tú serías el chico popular que todos aman, que se mete en problemas y él que sería capitán de natación —dije y él hizo una mueca.
—Lo de meterse en problemas no te lo niego —dijo y reímos.
—Ser semidios es más fácil si estás aquí —dije y él me sonrió muy distinto a las otras veces, sus ojos se iluminaron.
—Opino igual —dijo y miró a otro lado, no supe si fue mi imaginación o si realmente Percy se había sonrojado—. Debemos descansar, tú tienes que dormir con Andy de ninguna manera Luke dormirá con mi hermana.
—Durmió con Apolo.
—En camas separadas.
—De acuerdo —dije riendo y al bajar para mala suerte del chico, el par ya estaba dormido.

Luke recostado y Andy sobre su hombro con el libro en su rostro. Percy le quitó el libro y los tapó, pero alejo las manos de Luke de ella, depósito un beso en su frente y se dio la vuelta.

Maldición, pero yo tendría que dormir con él, ay Jackson a este paso ya no voy a resistir el besarte.

—Te dejaré el lado de los monstruos —bromeó acostándose en la cama.
—¿Acaso tienes cinco años?
—Puede ser —dijo y me acosté a su lado.

Percy se giro para mirarme y no sé que valentía en mis adentros me hizo girarme para ahora mirarnos. Percy sonrió con cariño, yo era el que se sentía un niño de cinco años deseando refugiarme en sus brazos.

—Ojala Bianca le este yendo bien —dijo y yo asentí.
—No sé que haré si algo le pasa —dije y él me miró confundido.
—No le pasará nada Nico, ella estará bien. Estaremos bien todos —dijo y me atrapó en un abrazo.

La calidez de la tela de su suéter me envolvió y pude escuchar su corazón marcando una melodía que no solo lo hacía vivir a él, igual a mí. Su olor característico tan agradable y embriagante.

—Descansa sombritas —dijo depositando un beso en mi frente.
—Descansa Sirenito —dije.

Holaaaa ¿Cómo están?
¿Qué les está pareciendo y qué esperan de está historia?
La verdad he intentado ser disciplinada y seguirla
Ya qué tengo muchas ideas Percico 😔
Jajaja, pero aquí seguimos
Hábleme un poco de ustedes
¿De que cabaña son? ¿Y qué campamento?
Yo soy de la cabaña 13 💀 y campamento Mestizo 🧡
Chaooo besos en la frente