Dirty, Little, Traitor [Scaramouche x F!Reader] ¡Español!

Las pesadillas que persiguen a Scaramouche

Las noches eran solitarias.

El cielo estaba cubierto de espesas nubes, ninguna estrella se atrevía a asomarse para dar algo de luz. Pero la oscuridad era casi relajante. Ni siquiera un duro heraldo como Scaramouche  podía mantener los ojos abiertos mientras atravesaba el hostil entorno de Liyue. Además, viajar solo era tan peligroso como ir a Snezhnaya sin una fuente de calor adecuada

No podía continuar, tenía que detenerse a pasar la noche. Tal vez una breve siesta de veinte minutos lo refrescaría para seguir caminando. Pero como no llevaba ningún equipo para dormir correctamente, tuvo que improvisar. Después de caminar, finalmente encontró un lugar adecuado para un descanso rápido.

Entonces, Scaramouche se sentó contra un árbol y se quitó su gran sombrero para apoyarse en el tronco de madera. Parecía bastante cubierto y se sentía mezclado con la naturaleza. Estaba lo suficientemente seguro de que cualquier transeúnte ignoraría esta área y seguiría adelante. El joven colocó el sombrero sobre la hierba a su lado y dejó escapar un bostezo cansado.

La zona de antes parecía haber sido utilizada recientemente como un campamento. ¿Quizás unos tres o cuatro viajeros pasaron por allí? Estaba claro que la fogata se usaba para cocinar algún tipo de brebaje alimenticio y aún había agujeros puntiagudos en el suelo de las tiendas de campaña. ¿Era posible que estuvieras en ese mismo campamento? Si ese era el caso, este era otro avance para Scaramouche. Pero había una pequeña posibilidad de que fuera otro decepcionante fracaso.

Tras observar su entorno por última vez, Scaramouche finalmente dejó que su cuerpo se relajara. Solo esperaba una siesta rápida, pero como esta era la única oportunidad de su cuerpo para descansar, cayó en un sueño profundo.

Eso no era lo que él quería. No quería dormirse del todo. Pero ya era demasiado tarde para echarse atrás, su mente ya se estaba apagando y su cuerpo se estaba quedando bloqueado. Aunque se sentía lo suficientemente consciente como para darse cuenta de lo que estaba sucediendo, estaba demasiado débil para siquiera mover un dedo.

—Al parecer está cansado... —La voz de una joven se escuchó de la nada.

—Estoy exhausto... —Replicó Scaramouche, abriendo lentamente los ojos.

Una joven que se parecía terriblemente a su querida secretaria-asistente se sentó a su lado en la hierba, mirando al frente. Por el rabillo del ojo, Scaramouche se fijó en su pelo, su bufanda y su uniforme azul hielo. Había una esencia helada irradiando de su cuerpo, aunque parecía haber dejado su tanque de hielo en otro lugar, Scaramouche podía sentir una de las pistolas contra su pierna.

El Heraldo tenía una mirada soñadora escrita en toda su expresión cuando lo miraste, al mismo tiempo que te volvías tímida y mirabas hacia otro lado. Sintiéndote ligera como el aire, ajustaste tu postura y te acercaste al joven, moviéndote a su lado.

—Liyue apesta —Murmuraste en voz baja y llevaste tus rodillas contra tu pecho para encorvarte un poco —Hace calor cuando llueve y el aire se seca a medio día. Odio a esta nación y a su gente. Volvamos a Snezhnaya.

Cuando Scaramouche miró más de cerca, de repente se puso furioso, casi medio sorprendido al verte sentada a  su lado tan casualmente.
—No puedo creerte, [T/N]. ¿Cómo puedes mostrarte después de arruinarlo todo? Cuando te ponga las manos encima, voy a-

—¿Matarme? —Terminaste y finalmente te volviste hacia él, mirando completamente al Heraldo —Señor, si yo muero, usted también muere. Lo que está insinuando contradice completamente este vínculo que tenemos. En el momento en que mi vida se apague, usted sufrirá una muerte natural o se suicidará.

—Eso no es cierto.

—Es muy simple, mi Señor. Ya puedo imaginar todas las cosas terribles que le hará a su cuerpo después de darse cuenta de que me mató. Tal vez robará el cuchillo de sacrificio de un agente Fatui y mutilará su estómago para deshacerse de esa incomodidad retorcida de culpa que se acumula en sus entrañas. Una muerte lenta y horrible lo espera, Señor. Si eso es algo demasiado sangriento y desordenado, probablemente hará que los Cicins Cryo se arrastren dentro de sus oídos y congelen su cerebro desde adentro. Su cráneo se romperá y dejará sus ojos como duros cristales. Eso sería hermoso.