Miko necesitaba vacaciones, y volver a sentirse Victoria por un rato. La vicky que no era famosa, la vicky que dormía tranquila, la vicky que caminaba y no existían las cámaras, la vicky que tanto extrañaba. Necesitaba volver al pasado, o cambiar el...
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05/12/23
El día comenzó bastante tranquilo para mí. Tuve dos días bastantes agitados de trabajo y trámites, mantener al viejo de mi papá era bastante complicado, nada era bueno para él y se quejaba de, según él, la poca plata que le mandaba. Mi intensión no era mantenerlo a él, sino que a mi hermano. Desde que mi mamá se fue los problemas en mi casa aumentaron, ella de alguna manera ponía una estabilidad en el hogar, poca, pero aliviaba el entorno.
Siempre habíamos sido tres, dos femeninas y un masculino dentro de una pequeña casa, no teníamos la mejor economía pero al menos comíamos. Hubo un tiempo en que fuimos felices, mamá trabajaba en una repostería, ella amaba la cocina y yo creo que heredé eso de ella; papá trabajaba en una empresa como administrador.
Cuando tenía cinco años recuerdo haber escuchado a mis papás pelear, es el primer recuerdo que tengo de una de las tantas peleas que después vinieron. Papá quedó desempleado, y con eso comenzaron los problemas económicos, no buscó otro trabajo, mucho tiempo después supe por que motivo. A partir de ahí las peleas fueron constantes, recuerdo llegar a casa un día de la escuela, no estaba tan lejos de mi hogar asi que podía caminar tranquilamente hasta ahí, mamá estaba en el piso, con golpes en la cara y llorando, tenía un poco de sangre fresca y entonces deduje que los golpes fueron recientes.
>> Una Bianca pequeña caminaba por la vereda de su casa, unos pasos más y llegaba a su destino. En sus hombros colgaba una mochila rosa llena de cuadernos y útiles escolares, también algunos juguetes.
Abrió la puerta de su casa con una sonrisa en la cara, su mami siempre la recibía con una merienda después del colegio. Su sonrisa se borró de su rostro apenas vió a su mamá en el piso, llorando, cerca de las escaleras y en la inocente mente de la niña solo pensaba que se había caído de las escaleras.
- ¿Mami? ¡Oh por Dios mami! ¿Estás bien? Voy a buscar a papá para que te ayude. - Su voz tenía una clara preocupación y desesperación, nunca había pasado algo similar. Estaba arrodillada a su lado, y cuando quiso levantarse para ir a buscar a su papi la voz adolorida de su mamá la frenó.
- ¡No! Papá no está. - Susurro de forma fuerte y rápida, con la voz cansada dejando rastro de que no se sentía bien.
La niña no sabía que hacer, no tenía familia cercana a la cuál recurrir, todos vivían en Brasil. Y cuando vio que su mamá se había desmayado hizo algo de lo que más tarde se arrepentiría.
- 911 ¿Cuál es su emergencia? - La voz de la operadora sonó por toda la casa que estaba silenciosa. Bianca estaba llorando, estaba desdeperada.
