𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟐.𝟐: 𝐋𝐀 𝐂𝐎𝐒𝐀𝐒 𝐂𝐀𝐌𝐁𝐈𝐀𝐍

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𝐋𝐀 𝐂𝐎𝐒𝐀𝐒 𝐂𝐀𝐌𝐁𝐈𝐀𝐍.

𝐋𝐀 𝐂𝐎𝐒𝐀𝐒 𝐂𝐀𝐌𝐁𝐈𝐀𝐍

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- Sabes... Estuve pensando ...

- Oh, algo nuevo. - Dije divertida, Ana me miró mal antes de tirar una servilleta sucia que había dejado algún cliente sobre la mesa. Entre las dos estábamos limpiando el bar para luego cerrar, ya era tarde.

- Dale tía, déjame hablar. - Ella fue hasta la barra en busca de la botella de cerveza que estábamos tomando entre las dos. - Toma. - Llegó a mi y me la ofreció, me senté sobre una de las mesas y ella en la silla.

- ¿Y?

- En mayo es mi cumpleaños y estuve pensando que pasarlo acá sería aburrido...

Interrumpí: - ¿Aburrido? Se supone que íbamos a pasarlo acá juntas, yo no soy aburrida. -

- No quise decir eso, obvio no eres aburrida solo que prefieres pasar el día leyendo libros tontos. - Ironizó.

- Que a vos no te guste leer no significa que sea una actividad aburrida, bebé. - Dije dándole un sorbo a la botella.

- Ya tía, admite que es aburrido. - Negué.

Quedamos en silencio unos segundos.

- Oye... - Susurró ella, hice un ruido con mi boca para que continúe hablando. - me encanta que me digas bebé, me exita un poco siendo sincera.

Comencé a reírme sin poder creer lo que ella había dicho, fue inesperado.

- Y yo pensé que eras hetero. - Mencioné.

- No te equivoques, lo soy. - Dijo parándose frente a mi. - Pero algún ligue con alguna chica he tenido antes.

Rei nerviosa, esto era raro, supongo que el alcohol hace sus efectos temprano hoy.

- ¿Ah sí? No me lo habías dicho nunca bebé. - Me atreví a soltar, usando un tono de voz más atrevido.

Ella abrió la boca levemente y soltó un suspiro. El silencio inundó el espacio por algunos segundos, había tensión, tensión que rompimos cuando empezamos a reírnos fuerte.

Me gustaba tener esta complicidad con Ana, era la primera amiga que tenía desde que pise Brasil. He conocido gente, obviamente, pero Ana se quedó conmigo y me demuestra el cariño amistoso que necesitaba hace rato.

- Dale boluda, decime. - Dije una vez que las risas cesaron.

- ¿Que te diga que?

- Tu cumpleaños estúpida.

- Ah siiii. Pensaba viajar a España, las dos juntas. - Me miró fijamente, ilusionada.

Yo dude un poco antes de responder.

- No creo que yo pueda acompañarte, no tengo la plata suficiente para hacerlo y es un viaje nada barato. - Dije comenzando a jugar con mis dedos, en acto de ansiedad. Odiaba que la plata sea un problema para mis planes.

~ 𝐉𝐔𝐒𝐓 𝐋𝐈𝐄𝐒 ~ 𝐘𝐎𝐔𝐍𝐆 𝐌𝐈𝐊𝐎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora