𝐋𝐚 𝐭𝐫𝐚𝐯𝐞𝐬𝐢𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐯𝐢𝐚𝐣𝐞𝐫𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐚𝐥𝐛𝐚 (𝐏𝐞𝐭𝐞𝐫 𝐏. 𝐘 𝐓/𝐧 𝐋𝐞𝐰𝐢𝐬)

𝟎𝟏𝟓

Narra Peter.

Me levante cuando se ti que me tiraron agua, abrí los ojos y quede en posición de combate, pero solo vi a Edmundo y Caspian.

—Al menos no moriste.—Dijo Edmund.—Que el hubiera dicho a T/n donde murieras.

Yo lo vi a los ojos y recordé todo de golpe.

—¿Donde están?—Me levante rápido y empecé a buscar por todas partes.—¿T/n? ¿Los niños? ¿Donde está Lucy?

Caspian me tomó de los hombro y dejó de moverme.

—Se los llevaron, los van a vender como esclavos, debemos buscar la manera de salir de aquí, antes de que a Lucy, Elizabeth, Ares y Eustace los vendan como esclavos y a T/n a un burdel.

Yo quede pálido, en solo pensar a mis pequeños hijos sirviendo a alguien, me enfurecía y mucho más en pensar que alguien tocaba a mi esposa. Yo soy el único que la puede tocar en lugares indebidos.

—Debemos de hacer algo.

Me asome por la ventana con barrotes que había.

—¿Que es eso?

Señale a una niebla verde que se aproximaba y se tragaba un barco

—¿Que es esa bruma?.—pregunta Caspian.

—Eso es algo que se lleva a las personas para nunca volver.—dijo una voz a nuestras espaldas.

Yo me voltee a una gran velocidad, al igual que todos y vimos a una especie de sombra.

—Quien anda ahí, muestrate ante tus reyes.—Dije yo

—Cálmate Peter.—Me dijo Caspian

—No puedo Caspian, mi familia esta que le pasa algo malo...

Caspian me iba a contestar cuando una voz dijo

—Caspian... yo servir a un rey que hace mucho se llamaba así.

—Ese debió ser mi padre señor, yo soy su hijo Caspian décimo.—Dijo Caspian acercándome.

—Mi señor.—dijo he intento arrodillarse, pero Caspian lo detuvo.

—No se arrodille mi Lord, esta muy débil...

El no puso objeción así que todos nos acercamos.

—Permítame ayudarle mi lord.—Dije y le ayude a sentarse mejor.

—Muchas gracias señor....usted me recuerda a alguien de un libro.

Trate de sonreír.

—¿Puedo saber a quien me le parezco?

—Las antiguas leyendas, me recuerda al sumo monarca Peter el magnífico.

—Es que ese soy yo mi Lord, y el es mi hermano El Rey Edmund el Justo.

El vio a mi hermano y luego a mi y trato de inclinarse pero no se lo dejé.

—No se preocupe Lord.

—¿La reina? ¿Los príncipes? ¿están aquí?

Yo aprete mis manos con fuerza.

—Si, solo que a ellos los llevaron a la venta.

El abrió los ojos.

—Mi rey, debemos sacarlos de ahí, no podemos dejar que los lleven a la bruma.

—Mi Lord, ¿que es esa bruma?.—pregunta Edmund.

—Nadie lo sabe un mal que asecha a Narnia desde que mi señor, Caspian noveno estaba en el poder.

—¿Como podemos detenerla?.—pregunta Caspian.