Algo más que un isekai

Creencias

Antes de que el grupo se encontrara con el reino de los ninchi se toparon con una ciudad del mundo de Cayden, al llegar notaron como casi todo el lugar parecía muerto y solo habían un par de tiendas abiertas.

-Wow, que gran recibimiento. – Dice Cayden de manera sarcástica.

-Bien, parece que solo hay un lugar donde nos podremos quedar. – Comenta Saray mientras ve solo un hospedaje abierto.

-Meh, vayan ustedes nomás, hoy quisiera dar una caminata solitaria.

-¿Que planeas Cayden? – Pregunta Omar.

-¿Te soy sincero? Solo quiero ir a comer algo solo, está ciudad parece ser de nuestro mundo así que seguramente debe haber algún vendedor de pollo broaster o al menos un chifa. Si encuentro uno bueno los llevaré mañana.

-Bien, solo no te pierdas. – Con eso dicho Cayden se fue a caminar.

-Que genial, hoy es nuestro día de suerte. Puedo sentir la presencia de uno de los sacos de basura que debes matar. – Dice el fantasma con mucha alegría.

-Guiame rápido, que quiero dormir.

-Pero si de igual forma te levantaras temprano, como siempre.

-Solo a veces.

-Lo que digas. – El fantasma guío a Cayden hasta la parte más apagada de la ciudad, dónde no se veía a nadie ni había casi ninguna iluminación. Después de vagar por ahí paró frente a un basurero.

-¿Se supone que está por aquí? ¿Acaso este basurero tendrá una puerta secreta?

-No lo sé, solo se que lo siento dentro del basurero. – Con cuidado Cayden abre el basurero para encontrarse con varios cuerpos desmembrados, algo sorprendido lo cierra rápido.

-Bien, parece que el trabajo aquí ya está...

-¡Cayden, hay algo que se acerca por tu derecha! – Sin pensarlo Cayden le hizo caso y esquivo una lanza resplandeciente.

-¿Pero qué...?

-¡Algo más viene, cuidado! – Cayden intento subir a los techos de las casas del lugar pero algo lo agarro de la pierna y lo estampó contra el suelo, dejandolo sin aire y quitándole la consciencia poco a poco...

Cuando Cayden recupera la consciencia nota que está atado en una silla, mirando alrededor ve diferentes herramientas tiradas en una mesa, casi todo el resto del lugar estaba polvoriento y con basura.

-Bien, al fin despertaste. Estamos en un sótano, el tipo que te trajo está regresando y también es inmune a mis maldiciones. ¿Cómo saldrás de esta?

-Lo mejor es esperar al momento exacto, si no lo encuentro entonces lo crearé y entonces...

-¿Ya despertaste? – De unas escaleras apareció un hombre de unos 40 años, a simple vista parecía un hombre con traje formal y ya pero poseía una intensa aura – Bien, así podemos hacer las cosas más rápido.

-¿Me explicas por qué...

-¡Ja! ¿En serio te tengo que explicar algo tan básico? ¿Jamás te enseñaron a nunca desobedecer las enseñanzas de Dios?

-Oh no, eres uno de esos extremistas ¿eh? Eso sumado al hecho de que no me has matado significa que quieres algo de mi ¿no?

-Lo que quiero es simple, trae a los demonios aquí para poder matarlos.

-¡Ja! ¿En serio crees que haré algo... – Rápidamente el señor le da un fuerte golpe en el estómago.

-Igual tenía que preguntar, de todas formas con esto no creo que me tarde tanto.