Capítulo 21

266 22 2
                                    

Narra Ayato:

—No, como crees... El y yo terminamos hace años... —Dije mientras me volvía a sentar para seguir comiendo.

—Bueno, creo que lo mal pensé—Dijo Mido mientras seguía comiendo.

Después de un rato bajo Taro, le ofrecí algo de comida y el aceptó. Así que lo deje en el comedor mientras subía a mi habitación junto a Mido, Taro se nos quedo viendo un poco raro, pero no me importó.

Ambos nos acostamos abrazados, era tan feliz ahora. El había vuelto y ahora si tenía en claro mis sentimientos, y lo que quería con el. Después de un rato, ambos nos habíamos dormido.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Hoy Mido y yo salimos a pasear, el clima no era tan bueno, pero se veía que no iba a llover el día de hoy. Salimos tomados de las manos, y aunque suene raro, tocar su mano me genera una paz y una tranquilidad de saber que no se ira.

En medio de el parque, nos encontramos con nada más y nada menos que a Hazu junto a Osoro, esos dos se hicieron pareja y según que ahora estaban casados, algo impresionante teniendo en cuenta la gran diferencia de estos dos.

Hazu es un chico muy dócil y tímido, y muy bajito. Y Osoro es alguien con quien no te preferirías meter, además de que su altura es bastante considerable si hablamos de personas altas. El al verme me saludo muy feliz y con una gran sonrisa.

Osoro por su parte, solo se quedó parada en donde estaba viendo como nos saludabamos. Pero algo llamo mi atención en ella, su panza estaba ligeramente abultada.

—Vaya Hazu, no me digas que...?

—¡Si!, Seremos padres! —Dijo mientras ponía una mano en la panza de Osoro.

—Gritalo más fuerte tontito—Dijo ella mientras sus mejillas tomaban un tono carmesí.

—Felicidades, cuanto meses tienes? —La pregunta fue para Osoro.

—Apenas llevo un mes, de nota desde lejos—Dijo ella algo irritada.

—Y que hay de ti Ayato?, veo que tienes a un acompañante—Dijo Hazu mientras veía a Mido de pies a cabeza—Acaso no es el mismísimo Mido Rana?, para que preguntar si es el, estan saliendo?.

—Bueno...

—Si, si estamos saliendo—Dijo Mido mientras dejaba un beso en mi mejilla.

—Vaya, les deseo mucha suerte...! —Antes de terminar de hablar, Hazu fue interrumpido por Osoro.

—¡Tengo hambre!, ¡El bebé esta pidiendo comida! —Dijo Osoro mientras ponía sus manos en su panza.

—Bueno, creo que es hora de irme, adiós Ayato! —Dijo el para tomar el brazo de Osoro e irse.

—Vaya, quien diría que esos dos estarían juntos. Dentro de mi criterio, para mi la esposita sería Hazu si no hubiera embarazado a Osoro—Dijo Mido mientras veía como esos dos salían del parque.

—Y dentro de tu criterio, quien sería la esposita entre nosotros dos? —Dije mientras lo veía interrogante.

—Bueno, serias tu—Dijo para después dejar un beso en mis labios.

—¡Oye!, no debe ser así, tu serias la esposita ya que tu te arreglas más y tardas más tiempo—Dije mientras le daba un pequeño golpe en el brazo.

—Pero tu ni querido Ayato, serias el de abajo en el sexo—Dijo para sonreír de esa manera socarrona de siempre.

—Mejor cállate, estoy escuchando cosas que no me están convenciendo—Dije mientras me enojaba.

No se, pero me enoje. Después de pasear llegamos a casa, todo estaba muy tranquilo el día de hoy, y no tenía ningún tipo de estrés encima ya que hoy no fui a trabajar ya que tengo el día libre.

Mido y yo nos pusimos a ver una película, el se veía muy tranquilo mientras olía mi cabello.

—Sabes... Debes venir a vivir conmigo—Dije mientras tomaba su mano.

—¿De verdad quieres eso? —Dijo mientras dejaba un pequeño beso en mi frente.

—Si, si quiero. Me gusta tenerte cerca ahora... Por que, te amo—Dije mientras me sonrojaba.

—Sabes, yo te amo más... Y me hace tan feliz el saber que me quieres cerca—Dijo mientras dejaba un pequeño besito en mis labios.

Se sentía tan bien, sus besos le daban calor a mi alma. Estaba tan feliz estando a su lado, y puedo decir que es lo mejor del mundo. Mido me acostó en el sofá y empezó a dejar pequeños besos en mi cuello...

—Ayato, me dejarías cumplir un pequeño sueño?...

~𝙴𝚕 𝚊𝚖𝚘𝚛 𝚍𝚎 𝚞𝚗 𝚙𝚛𝚘𝚏𝚎𝚜𝚘𝚛~ 𝙰𝚢𝚊𝚝𝚘 𝚡 𝙼𝚒𝚍𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora