Déjame ir (Kookmin)

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Jimin tomó su labio inferior lentamente manteniendo su mano en la frente izquierda del príncipe. La piel estaba suave y caliente bajo sus dedos. Cuando lentamente recorrió su rostro, Jungkook cerró los ojos al tacto. Suaves yemas de los dedos rozaron sus cejas, tocaron los ojos bellamente formados y descendieron acariciando sus mejillas hasta llegar a su mandíbula. Antes de que el príncipe tragara más, la mano fue colocada en el lado derecho. Después de dejar que el toque trazara su fuerte rostro hacia abajo, abrió los ojos para ver al omega mordiéndose los labios.

"¿Eso esta bien?" preguntó cuando sintió los músculos de la cara del príncipe apretarse bajo sus dedos.

"¿Finalizado? ¿Ya?" El príncipe realmente quería que el toque estuviera ahí por más tiempo y cuando Jimin negó con la cabeza, Jungkook suspiró aliviado. Tragó saliva mirando cómo la nuez de Adán del omega se movía una vez antes de mantener los dedos de ambas manos en ambas cejas. Jimin tocó la línea del cabello del príncipe en sus fuertes cejas. La forma era bonita. Jimin sonrió para sí mismo haciendo sonreír al príncipe también. Jungkook cerró los ojos cuando Jimin le tocó los ojos. Yoonha tenía razón, de alguna manera era redondo y tal vez también le gustaba, las pestañas eran fuertes y largas. Apartó su mano y finalmente mantuvo los dedos de su mano derecha entre las cejas del príncipe. Los ojos ahora abiertos de Jungkook se volvieron más oscuros cuando el omega lentamente recorrió con sus dedos la suave piel tocando su fuerte y larga nariz y luego deteniéndose debajo de las puntas de su nariz. Jimin se lamió los labios tocando lentamente los labios del príncipe con su pulgar. El arco de Cupido, la suavidad, los labios finos pero regordetes se abrieron bajo sus lentos toques. Cuando Jimin deslizó sus manos hasta la barbilla del príncipe y finalmente tocó la fuerte mandíbula, Jimin sonrió al darse cuenta de lo afilada que es.

"Es realmente guapo, alteza..." su alfa era realmente guapo, con rasgos fuertes, varoniles y afilados. Eso enorgulleció al omega. Cuando estaba a punto de retirar la mano, un fuerte agarre lo detuvo por la muñeca. Cuando la boca de Jimin se abrió en shock, Jungkook de repente arrastró al omega más cerca. Los rostros cerca uno del otro respiraban chocando entre sí, los ojos del príncipe se posaron en el bonito rostro de su omega.

"Y tú eres el más bonito..." Jungkook se acercó lentamente tomando el labio inferior entreabierto de Jimin entre el suyo. La respiración de Jimin se detuvo al darse cuenta de que había sido besado por el alfa. Sus dedos en el agarre del alfa se cerraron en un puño. Jungkook besó los labios regordetes acercando al omega por su cuello. Jimin cerró los ojos dejando que el príncipe lo besara y lentamente reaccionó al beso, devolviéndole el beso. El suave toque y tirón en sus labios hizo que su corazón latiera más rápido y sin siquiera saberlo, sus ojos se humedecieron ante la idea de dejar al príncipe un minuto después. A la idea de que este sea ese beso de despedida.

Cuando el príncipe estaba a punto de soltar al omega y retroceder, se sobresaltó cuando Jimin levantó sus piernas del suelo y se sentó a horcajadas sobre el príncipe sentado sobre sus fuertes muslos. Sus ojos se abrieron para ver el largo cuello de Jimin a la altura de sus ojos y sus pequeñas manos abrazando su cuello.

"Jimi-" fue cortado por los labios del omega presionando sus labios besándolo. Jungkook soltó un suspiro inclinando su cabeza hacia arriba dejando que el omega lo devorara, enviando sus manos alrededor de la cintura del rubio. Ambos se extrañaron. La calidez, los caricias suaves, los besos y solo ellos. Los extrañaban así que simplemente besaron más sus labios. Jungkook sabía que nunca se cansaría de esos labios carnosos y acercó aún más a Jimin por la cabeza del omega. Después de unos segundos, el omega rompió lentamente el beso tirando del labio superior del alfa hacia el suyo y jadeó sobre ellos, manteniendo sus frentes unidas. Estaban sin aliento y sintieron la cercanía. Jungkook acarició lentamente el cabello rubio del omega abriendo los ojos para mirar al chico. Sus labios parecían tan sabrosos que el príncipe deseaba poder comérselo de nuevo.