Nadie!

Parte 33: Miedos encontrados y re descubiertos

-Que has hecho, por amor a Dios, no quiero perderte, te necesito- Fue lo único que logre escuchar a lo lejos, era su voz, no sonaba tan engreída y ruda como siempre, más bien esta entrecortada casi ahogando el llanto. Abro los ojos lentamente y ahí está el, con esos ojos negros profundos completamente cerrados y ya no me miran como siempre

Me remuevo un poco tratando de sacar el agua acumulada en mis pulmones, tomo mi mamo y la coloco en su mejilla para quitarle las lágrimas que brotan de sus ojos y caen en mi rostro

-Matt, no llores- digo con la voz entrecortada. Abre los ojos como platos, y al verme lo único que se le ocurre hacer es abrazarme, estoy en toalla, y puedo sentir su piel rozar con la mía enviando choques de electricidad por todo mi cuerpo. Nuestras respiraciones se unen al encontrar sus ojos con los míos, estoy muy fría, casi congelando -No me expliques nada ahora, luego tal vez-

Yo solo asiento con la cabeza

El deposita un tierno y casto beso en mis labios, y los estampa con los de él. Es corto, pero demuestra amor y preocupación por mí -Matt, tengo mucho frío, necesito vestirme-

-No te quiero soltar- dice Matt casi con un suspiro

-No te preocupes, estaré bien. Te lo prometo-

El solo asintió con la cabeza

***

Ya me había vestido, decidí ponerme un vestido que me quedaba un poco corto y unas converse negras, y mi cabello que aún estaba mojado lo deje suelto. Mis mejillas estaban rojas al igual que mi nariz y mis ojos hinchados por el agua.

Baje las escaleras con mucho cuidado porque me sentía algo mareada a consecuencias de mi gran momento de locura. Sé que le debo una explicación a Matt y no por que el me lo haya pedido sino porque es lo correcto. La verdad era que no podía bajar las escaleras por mí misma, estaba muy débil. Sentía que me iba a caer, cuando de pronto siento una mano que me toma por atrás de la cintura, atrayéndome hacia el para evitar mi caída

-Ya, todo estará bien- me dice su suave y melodiosa voz al oído

-Lo siento-digo con los ojos cerrados casi entre sollozos

Él toma mi cara entre sus manos y me obliga a mirarle a los ojos para así decir -No quiero que me vuelvas a decir que lo sientes sino se aun porque estas así

-Es que es muy duro para mí-

-Que, que es, dime quiero ayudarte pero necesito que me digas que te sucede-

Sus palabras fueron casi gritadas y siento que el noto que sus gritos me lastimaban, se acercó a mí con un acogedor abrazo al cual los pocos segundos le respondí igual, pero en comparación al yo no quería soltarme de él, lo quería cerca de mí, no quería soltarlo y con mi abrazo lo atraje hacía mí, necesitaba de él, -Por favor no te alejes de mi- le dije casi rogando

-Nunca- respondió el con un beso en mis labios

-Ahora si me vas a tener que explicar que te paso, vamos a la habitación-

-Está bien-

Subimos la escaleras tomados de las manos, para dirigirnos a la habitación, me dirigí a la cama y tome asiento al igual que el

-Vamos, dime-

-Pero no creo que pueda decirte todo de una vez, por favor ten algo de paciencia conmigo-

-Está bien-dijo sin oponerse. Yo pienso que el solo quería que le dijera que me sucedía, pero quería descansar también. Así que sin darle más vueltas al asunto hable

-Es que yo no era así antes, he pasado por mucho, yo era una chica corriente, muchas cosas me hicieron cambiar, me lastimaron mucho y no solo con palabras, sino...- No creo que pueda, no ahora debo descansar, no me siento muy bien, no puedo.

Di un giro, dándole la espalda

-Lo siento Matt, no puedo, por favor quiero descansar- le dije haciendo un puchero para que le contara después

-Está bien, está bien, pero promete que me contaras todo lo demás-

-Está bien - dice dándome un beso en los labios

-Creo que es momento de descansar, ven acuéstate aquí a mi lado-

Yo solo hice lo que él me dijo y me acosté junto a él, y sentí su tierno amor hacia mí, su cariño y sus palabras tranquilizantes hacia mi

-Gracias- le dije ya un poco más calmada

- ¿Y por qué me agradeces? -

-Por quererme tanto como lo haces, por amarme, y sobre todo por darme tiempo para hablar contigo y contarte todo, es muy difícil para mí, pero tú lo entiendes y la verdad te amo tanto que no quiero ocultarte nada, nada-

-Está bien, ya me contaras, pero no te quiero ver así, tienes idea el susto que me diste, al ver que no reaccionabas, no quiero perderte nunca, te quiero, por favor no me hagas eso de nuevo-

-Lo siento, no creía que eso pasaría, no pude controlarme, es que recordé muchas cosas, es que tengo muchos miedos unos son nuevos y otros ya los tenía y no me gusta recordar eso, pero ahora mismo solo me importa recordarte a ti y en todo lo que siento por ti-

Sus ojos negros brillaron como siempre solían hacerlo cuando estaba cerca de mí, su sonrisa la miré y en ella pude ver todo su amor.

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