¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Jude acababa de terminar de entrenar, y estaba yendo hacia el vestuario junto a sus compañeros entre risas y bromas.
—Oye Jude, ¿te vienes a casa de Vini un rato? Vamos a ir algunos a jugar a la play y bañarnos en la piscina —le preguntó su compañero Kepa.
—Me encantaría, pero he quedado con mi novia para ir a por un helado —respondió algo apenado por rechazar la invitación.
—No pasa nada tío, otro día podrás venir —le reconfortó el guardameta, mostrándole una sonrisa la cual fue devuelta por parte del inglés.
Una vez duchado y vestido, Jude cogió su bolsa de deporte, se despidió de sus compañeros y fue hacia el parking, donde le esperaba Aida para llevarle, ya que el todavía no tenía el carnet.
—¿Que tal el entreno hoy? —preguntó nada más el inglés se subió al coche, recibiendo un pico de parte de este.
—Bastante bien, como siempre. Ahora se iban a ir algunos a casa de Vini para jugar.
—Cariño, ¿seguro que no quieres ir? Eres nuevo en el equipo y prefiero que te integres bien —espetó mientras arrancaba el coche.
—Aida, sabes que no antepondría nada a pasar tiempo contigo.
—Lo sé, y eso me preocupa un poco, quiero decir, me encanta estar contigo, pero no me parece bien que lo antepongas a estar con tus amigos en este caso.
—Amor, solo van a ir a casa de Vini a jugar a la play, no me estoy saltando un partido o algo, lo harán más veces.
—Prométeme que la próxima vez que te inviten vas a ir, porfavor —dijo mirando amenazante.
—Vale, te lo prometo —cuando salían de la Ciudad Deportiva, había unos fans, pocos a decir verdad —. Para el coche por favor, hay pocos, voy a hacerme fotos con ellos.
—Claro que si cielo —contestó, para momentos más tarde parar el coche donde los fans se encontraban. Aida no podia evitar mirar con una sonrisa a Jude, le encantaba ver como a la mínima que podía hacia lo que fuera para estar con sus fans, para ella, Jude era un ángel caído del cielo.
—Adiós chicos, me encanta estar con vosotros —se despidió Jude mientras subía la ventanilla —. ¿Que me miras tanto? —preguntó, viendo como le miraba su novia, mientras que volvía a poner el coche en marcha.
—Me encanta que siempre que puedes intentas hacerles felices —contestó simplemente.
El coche se dirigió a la heladería favorita de ambos, que se encontraba en una zona no tan visitada de Madrid, por lo que no solían encontrarse con gente que conociera a Jude.
Una vez dentro de la heladería, pidieron un helado para cada uno, de vainilla para Jude y de turrón para Aida. Cuando los tuvieron en sus manos, se sentaron en una mesa algo apartada del resto, donde se pasaron la tarde hablando de cómo les había ido la semana, mientras que se escuchaban atentamente entre ellos, respetando el turno de palabra sin interrumpirse.
Después de un par de horas, decidieron volver a casa, así que se dirigieron hacia el coche. Tras un rato de trayecto, Jude se dio cuenta de que no estaban yendo hacia su casa, lo cual le pareció algo extraño.
—Aida, ¿dónde estamos yendo? —ante la pregunta, la chica simplemente le miró con una sonrisa y subió la canción que acababa de empezar a sonar; Love Story de Taylor Swift —Aida no es gracioso, donde estamos yendo.
—Ya lo verás, ahora, deja de quejarte tanto y escucha la canción —Jude resopló ante esta respuesta, pero su pequeño enfado no le duró mucho, ya que segundos más tarde ya se encontraba cantando la canción con la chica.
Tras quince minutos más de viaje, llegaron a una casa que a Jude le pareció bastante familiar.
—Aida, no hacía falta, te he dicho que podría venir otro día —dijo con ternura el chico.
—Tranquilo no pasa nada, todos necesitamos nuestros momentos con nuestros amigos, voy a casa y cuando hayáis acabado vengo a buscarte, ¿vale?
—No hacía falta, pero gracias —dijo con una sonrisa, para seguidamente darle un beso a modo de despedida.
•••
Unas cuantas horas después, Jude había avisado a Aida de que la gente se iba a ir en breve, por lo que ella ya se encontraba subida en el coche, dispuesta a ir a por él. Una vez estuvo frente a la casa de Vinicius, llamó a Jude, avisándole de que saliera, a lo que cinco minutos después se encontró al moreno saliendo por la puerta.
Nada más entró en el coche, le dio un beso, el cual ella obviamente correspondió, hasta que tuvieron que separarse para poder respirar.
—Te lo has pasado bien por lo que veo —comentó con burla Aida.
—Si, pero estoy tan cansado que solo me apetece tirarme en la cama y dormir contigo —finalizó la conversación, recostándose en el asiento de copiloto mientras miraba con una sonrisa a su novia conducir.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Segundo shot terminado🙏🏼 Pedido de chateriinaaa , espero que te haya justado💓 Votad si os ha gustado y no dudéis en comentar o escribirme al privado si queréis de algún otro jugador, siguiendo las pautas que salen en la introducción🫶🏼
