𝟎𝟏.

4.1K 122 6
                                    




UNA BALA - Milo j, Peso Pluma

Malyra se encontraba junto a Pau, su mejor amigo desde que ambos tenían uso de razón

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



Malyra se encontraba junto a Pau, su mejor amigo desde que ambos tenían uso de razón. Estaban en casa del segundo mencionado, tumbados en su cama abrazados en un cómodo silencio, pues ese era el día que Pau debutaría en Champions y estaba bastante nervioso, por lo que había llamado a Malyra para poder despejarse.

—¿Y si no lo hago tan bien como Xavi se espera? —dijo de repente el moreno, acurrucándose más en el pecho de la chica.

—Pues no pasaría nada Pau —contestó empezando a acariciarle el pelo —. Piensa que si Xavi te pone a jugar, es porque confía en ti y ve que tienes potencial. Entiendo completamente que te sientas inseguro, pero debes pensar en que si estás donde estás es por algo.

—Suerte.

—Pau, mírame —dijo incorporándose en la cama, apoyando su espalda en el cabecero de esta, ocasionando que Pau se sentara a su lado imitando su acción —. No estás ahí por suerte, estás porque eres muy bueno en lo que haces, podrían haber elegido a cualquier otro canterano, pero te han elegido a ti, ¿sabes por qué? —el chico negó ante la pregunta —Porque Xavi y el equipo confían en ti, así que quiero que cuando llegues a ese campo le enseñes a esos italianos como se defiende —finalizó ocasionado la risa del contrario.

—Gracias Malyra, lo encesitaba —dijo para después abrazarla, escondiendo su cabeza en su cuello, causándole cosquillas a la chica con su respiración.

Se quedaron así un rato más, hasta que vieron la hora y se dieron cuenta que deberían empezar a prepararse para ir al estadio, pues los padres de Pau los llevarían a ambos, ya que la chica iba a ver el partido por obvias razones.

Mientras que Pau se puso unos pantalones cargo y una sudadera Nike blanca, Malyra se puso unos pantalones vaqueros campana junto a una camiseta de la primera equipación del equipo con el nombre y número de Pau. Cuando Pau vio a la chica, no puedo evitar sonreír al ver a la chica que le gustaba desde hacía tiempo con su camiseta.

—Malyra antes de bajar, quiero darte las gracias por todo —la chica lo miró extrañada ante su repentina declaración, pero dejó que siguiera hablando —, quiero decir, siempre has estado apoyándome en cada cosa de mi vida, por mínima que fuera, y siento que nunca he llegado a recompensartelo del todo. También quería pedirte perdón por haber estado tan distante últimamente con todo esto, estaba muy agobiado y me alejé de ti sabiendo que solo tú podías ayudarme con todo esto —en ese momento, Pau ya había agarrado las manos de Malyra entre las suyas, mientras las acariciaba suavemente y ambos se miraban con un brillo especial en los ojos.

—Pau no se que decirte —contestó apenada la chica, soltando una risa nerviosa.

—No digas nada, solo... Solo abrázame porfavor —y Malyra lo hizo, sintiendo como algunas lágrimas mojaban levemente su camiseta, preocupándose instantáneamente y haciendo más fuerte el abrazo entre ambos.

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 || 𝗳𝘂𝘁𝗯𝗼𝗹𝗶𝘀𝘁𝗮𝘀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora