¡El NO es mi hermano! (TMNT 2012)

Déjame estar a su lado

En el laboratorio aún estaban el par de hermanos viendo ya los datos que necesitaban, Donatello estaba feliz por lo que encontró.

Le explicó al mayor que solo contenía información sobre el infante, desde que era una tortuga mascota hasta los resultados de su mutación, pero lo más importante solo era un almacenamiento de información, no era un aparato peligroso.

— Entonces al final no era un rastreador como pensábamos — confirmo el azulado aliviado sobre eso.

— Está información me ayudara para que podamos saber más sobre Mikey y asegurar su salud — el genio también estaba aliviado de por fin pasar página sobre la tensión familiar.

— Perfecto iré a decirle tanto a sensei como a Rapha sobre esto, pero antes iré a ver a Mikey — Leo fue pronto a buscar al pecoso.

Antes de poder salir del laboratorio escucharon unos gritos y pasos que se escuchaba por su hogar. Leonardo salió a ver qué pasaba y encontró a su hermano con el menor en sus brazos.

— ¿¡Rapha que pasó!? — pregunto el mayor acercándose al rojizo quien no dejaba de hiperventilar.

— Ayudalo — fue lo único que respondió entregándole el caparazón donde se encontraba el de orbes azules.

Leonardo supo que lo más importante en ese momento era ayudar al infante, se regresó con él al laboratorio de Donnie para que pueda atender al menor.

Detrás suya lo siguió Raphael quien veía desde la puerta como su hermano de morado atendía al pecoso, improvisando una cama para dejarlo descansar ahí. Vio a Leo salir para buscar agua fría para tratar de bajarle la fiebre.

— Mikey por favor sal de tu caparazón, es para poder ayudarte — escuchó al genio llamar al pecoso.

Desde que Rapha lo tuvo en sus brazos no ha salido de su refugio, fue instinto del menor para protegerse del frío y ahora se negaba a salir del caparazón.

— Rapha tráeme la lámpara que está en mi escritorio — Donatello le dijo sin moverse de dónde estaba.

Reaccionó en ingreso al laboratorio a buscar lo que le pidieron, al tomarlo fue justo al lado de Donnie quien acomodo la lámpara y conectó para que la luz ilumine al menor.

— ¿Esto lo va a ayudar? — pregunto el rojizo viendo donde se encontraba Mikey.

— No quiere salir, aún siente frío. Esto lo ayudará a entrar en calor mientras Leo regresa con el agua para bajarle la temperatura — explicó viendo como el caparazón se removía.

Vieron que abrió los ojos aún mantenimiento la cabeza oculta, poco a poco Mikey comenzó a salir de su escondite sintiendo un poco el calor que emanaba la lámpara.

Justo vieron a su hermano mayor regresar con un pequeño balde con agua y un pañuelo, Donatello tomo ambas cosas en sus manos y procedió a humedecer el pañuelo en el agua fría.

Lo coloco sobre el caparazón del pecoso para que esté hidratado, al sentir ese cambio de temperatura el menor tembló un poco.

— Tranquilo, esto te va a ayudar a que estés mejor — le consoló el azulado acariciando su cabeza.

— ¿No sería más eficiente si está dentro de una tina de su tamaño? — pregunto Rapha como sugerencia.

— No, recuerda que aún es pequeño y es más vulnerable a los cambios de temperatura — respondió el genio tomando el paño y volviéndola a humedecer.

Leonardo cambio su semblante y sin decir nada tomo del brazo a Raphael para sacarlo del laboratorio, este reclamaba que le suelte y estando ya afuera sintió como su brazo fue liberado.

— Ahora me vas a explicar que hiciste — fue directo el azulado.

— No trates de mentirme, Mikey estaba en mi habitación durmiendo y ahora esta sufriendo por temperatura alta — exclamó alzando un poco la voz.

El rojizo no podía ni mirar a los ojos a su hermano, la culpa lo estaba comiendo vivo y se siente el peor por haber expuesto asi a un inocente.

— Fue mi culpa si, no debí sacar a Mikey de la alcantarilla — respondió Rapha con dificultad.

— ¿Porque estaba afuera de la alcantarilla? — le cuestionó Leo viéndolo estando de brazos cruzados.

— Trate de deshacerme de él — contesto en voz baja pero el silencio hizo que lo escuche claramente.

— ¿¡Querías matarlo!? — un grito de pánico y enojo fue lo que salió de la boca del azulado.

— ¡Lo sé! No debí ni pensar en eso, ni siquiera se porque lo iba a hacer, eran tantas emociones que tenía — trato de explicar pero la culpa ya lo estaba matando que su voz salía con dificultad.

— Lo lleve al desagüe, luego me salí con el. Llegamos a lo alto de una azotea y estaba a punto de tirarlo, pero no pude — su voz se mezcló con el llanto, sin darse cuenta sus ojos ya estaban empañados de lágrimas.

— Papá tiene razón no puedo dañar a un indefenso, ya entendí que Mikey no es culpable de lo que hayan hecho con él — confesó viendo a su hermano con culpa.

— El nunca fue una amenaza Rapha, muchas veces te lo dije pero te aferraste a dañarlo y ahora esto — regaño el mayor viendo con decepción a su hermano.

— Lo siento pero no puedo dejar pasar esto, hablaré con sensei sobre esto pero por ahora no quiero verte cerca de Mikey, ya no puedo confiar en ti — se regresó al laboratorio pero escucho la queja del contrario.

— ¡No me hagas esto necesito ver qué esté bien! — pidió que lo dejarán estar a su lado.

— Por ahora no estará bien estando cerca de ti, ya hiciste suficiente — fue la última respuesta de Leo entrando al laboratorio para cerrar la puerta negándole el paso.

Leo escuchó los pasos de su hermano alejarse, había notado el arrepentimiento pero ahora ya no podía confiar en dejarlo a ambos solos. Miro donde estaba Donnie y se acercó para estar a su lado con Mikey.

— ¿Cómo sigue? — pregunto al ver a su hermano con un termómetro.

— Su temperatura ya bajo un poco, se anda recuperando — respondió dejando el aparato y volvió a humedecer el pañuelo para colocarlo nuevamente sobre el caparazón de Mikey.

Ambos vieron que el infante se había dormido, Leo tocó suavemente sus mejillas pecosas sintiendo como se removió para estar más cómodo y seguir durmiendo.

Estaba tranquilo que su hermanito se ande recuperando, aunque en su mente aún le preocupaba. Sabe que Rapha esta vez se pasó al exponer así al infante y peor escuchar que iba a dejarlo caer al vacío.

Su padre tenía que saberlo, además de ver igual por el bienestar del menor, si después de eso tendrían que separarlos prefiere que esté con aliados de confianza que arriesgar su vida de nuevo.

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Disculpen la demora la uni me estaba comiendo viva v: