Portada hecha por: @-cryxbaby
Mundial 2022 en Doha, Qatar. Gavi caminaba por afuera del estadio Lusail, luego del partido de Arabia Saudita y Argentina.
━━¡Andate a cagar, forro chupa pija!━━grito una morena de, seguramente, su misma edad.
Momento...
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PABLO'S POV
DESPERTE GRACIAS A LA ALARMA de Delfina, la cual ya habia sonado cinco veces y ninguna de esas veces se despertó. Así que yo fui el encargado de desactivar cada una de ellas.
Ya eran las nueve de la mañana y tenía dos mensajes de Aurora preguntando como me había ido.
Si, hable con ella sobre Delfina.
"¿Como te fue con la afortunada?" "¿La podré conocer pronto?"
Aurora era una chica muy ansiosa. Ella sabía que jamas había presentado a una chica en casa, solo lo iba a ser cuando sepa quien es la indicada para mi.
Y creo que ya me estoy dando cuenta.
Vi a Delfina dormir por un par de segundos. De fondo escuchaba como la puerta de la habitación estaba siendo tocada.
— ¡¡¡Delfii!!! ¡¡¡Abre por favor!!! — una voz femenina me hizo salir de mis pensamientos sobre lo preciosa que se veía Delfina durmiendo. — ¡¡¡Abre porque sino abriré yo!!!
Pasaron dos segundos y escuche como la puerta se abría de par en par. Los nervios comenzaron a aparecer y Delfina recién se estaba despertando.
— Por Dios, ¿quien mierda grita tanto a las diez de la mañana? — se quejó la argentina.
— ¡¡¡O. Por. Dios!!! — grito la chica rubia.
No se quien estaba más confundido. Si yo, Delfina, o la pobre chica que estaba enfrente nuestro.
— ¿Valeria? — se sorprendió la Delfina a mi lado.
— ¡Habías dicho que no había pasado nada! ¿Y ahora me los encuentro así? ¡Dios mio, chica. Me tienes que contar todo! — la rubia, que al parecer se llamaba Valeria, se acercó a Delfina lo más rápido que pudo. La tomó del brazo y tiro hacia ella para que la argentina hable.
— Vamos afuera. — dijo la argentina.
— Pero...
— ¡Ya!
La rubia se quedó mirándome y me habló. — Le haces daño y te juro que te matare con mis propias manos.
Delfina se puso nerviosa. Me sonrió y empujó a su amiga hacia afuera.
Cuando cerraron la puerta, no escuché nada más. Sólo las oía murmullos que eran incomprensibles.
