-¿Ahora por que lloras? Ni que la que se fuera a ir seas tu.-Dije con una sonrisa y me mordí el labio porque estaba apunto de llorar de nuevo.
-No puedo evitarlo, te he cogido mucho cariño.-Celia corrió a mí y me abrazo fuertemente.
De fondo se escuchó un largo ''Oooh''. Pero ella y yo seguíamos abrazadas.
El cambio de ciudad de nuevo podría estar bien. Además volver a Londres, sería lo mejor que haría. Perder de vista a Ashton aunque me duela, es lo mejor. Toda mi vida ahora dependía de la forma en que sonreía o simplemente cuando me miraba. También cuando besaba mis labios, aunque habían sido pocas veces, nunca lo olvidaría. Porque aunque nunca lo admitiría delante de él, Ashton siempre será mi primer amor.
Me separé de Celia dándola una sonrisa alentadora y todos juntos nos sentamos en el sofá del salón. La tarde se basó en bromas por parte de los chicos y unas cuantas miradas por parte de Ashton. No habló mucho durante el tiempo que nos reunimos pero tampoco se veía afectado. O al menos así me pareció a mí.
A las 11 acabó y nos quedamos Celia, Luke, Ashton y yo recogiendo los estropicios que dejamos por todo el salón. Me acerqué al equipo de música y enchufe el altavoz al móvil, rápidamente busqué mi canción favorita: Photograph. La música resonó por toda la habitación, como el viento en una tarde de invierno y me deleite con el sonido. Como pez en el agua me movía mientras recogía los vasos sucios de la mesa. Cuando acabó la canción oí aplausos y me gire sorprendida.
-¿Cómo que nunca me enteré que cantabas así?-Preguntó mi hermano con fingido enfado.
-No preguntaste.-Dije riendo.
Seguimos ordenando y cantando todos a la vez, incluso a Ashton le vi un poco más animado que antes. Sonreí al verlo reír con algo que estaban diciendo. Por supuesto yo no prestaba atención, solo lo miraba. Sus labios se veían tan tentativos y rosados que tuve que contenerme para no lanzarme a ellos. Sus ojos verdes rebosaban alegría y seguí sus movimientos cuando hizo una ola con sus manos, también se movía a lo Michael Jackson. Yo me vería ridícula haciendo tal cosa pero él lo hacía con tal gracia y comodidad que parecía como si lo hubiera hecho toda su vida. Apoyé mi barbilla en la parte posterior de la escoba y lo miré desoslada. Me di cuenta que me iba a causar mucho daño irme y más olvidarlo. De repente con ganas de llorar me aleje de allí y camine por el gran jardín de casa. Fui a la zona trasera donde la piscina brillaba bajo la luz de la luna y las estrellas. Metí los pies, después de haberme despojado de mis sandalias, en el agua tibia y los moví pesadamente de un lado a otro. Solo faltaban 3 días para regresar y cada vez lo estaba odiando más. Cuando llegué solo quería volver pero ahora... todo es distinto. No quiero volver, deseo quedarme y disfrutar del resto del verano con mi hermano y con Celi. Por supuesto también con Ashton, pasar días como aquel en la feria o incluso el de la playa. Cuando me besó por primera vez y sentí tantas mariposas revolotear en mi estómago y esa corriente característica al sentir su tacto, su mano en mi cintura... todo eso jamás se me olvidará, porque esos recuerdos son los que me sacan una sonrisa y me dan vida.
Una mano en el hombro me sacó de mis pensamientos. Giré mi rostro y le vi. Su cabello estaba mucho más brillante gracias a la luz de la luna. Sus labios estaban en una perfecta línea.
-¿Qué haces aquí, sola?-Sin previo aviso y antes de que abriera la boca se quitó los zapatos y los calcetines rápidamente y se sentó a mi lado.
-Necesitaba tomar el aire. Todo esto está siendo un poco... abrumador. Y no lo soporto.-Agaché la cabeza.
-¿Te irás así?-Dijo después de varios minutos en silencio. Lo único que se escuchaba era los grillos, grillando. Y eso me estaba poniendo nerviosa, también el silencio de la noche.
ESTÁS LEYENDO
El Amigo De Mi Hermano (Corrigiendo)
Teen Fiction-Luke, la próxima vez llevas más cuidado.-Le dije con severidad mientras me levantaba. Aseguré la toalla por si se movía y miré a mi hermano. Este no es Luke. -¿Que hay belleza?-Me dijo el intruso esbozando una sonrisa ladeada. El chico que tenía d...