-¡Estoy tan contenta de que estés aquí!-Canturreaba Celia, mientras yo me limitaba a remover el granizado de limón de un lado a otro.
-¡Y yo!-Dije con fingida emoción. Ya había pasado tres día desde mi regreso a casa de nuevo y se estaba haciendo de lo más sofocante y agobiante. Y debería sentir lo contrario pero por ciertas cosas, no es posible.
Ashton no me hablaba y para colmo tuve que aguantar a una rubia a su lado, cada vez que lo veía estaban los dos devorándose mutuamente. No hace falta decir que eso me sentó como un balde de agua fría. La chica es de todo menos fea, su cuerpo está bien moldeado. Por no hablar de sus ojos, de un azul intenso y claros como el cielo. Mis ojos son horribles comparando los suyos y su pelo... mejor lo dejo ahí, antes de que me deprima más.
-Tierra llamando a Camila.-Desperté de mi ensimismamiento y miré a mi amiga- Estás muy rara estos días y creo que puedo saber a que se debe.
-Estoy como siempre.-La respondí con desgana.
-¿Por qué justamente cuando vuelves, Ashton está con una chica y tu te encuentras así de mal?
Arqueo una ceja.-¿Tan mal estoy?
Ignora mi respuesta y continúa.-¿Pasó algo que no me hayas contado?
Juego con mi cabello, enrollando un mechón en mi dedo y después respondo tranquilamente.
-Sí.
-¡¡Cuenta!! ¡¡Cuenta!!-Su reacción me toma por sorpresa y no tengo más remedio que desenbuchar.
-Le dije que lo quería.-Suelto con tristeza recordando el momento.
Celia se tapa la boca con las manos y abre los ojos.
-¡¿Qué dices?!-Asiento y harta de remover el granizado me levanto y lo tiro a una papelera cercana.
Celia le da un bocado a su sándwich de nata y dice inquieta:
-¿Qué pasó para que tú estés así?
-Justo en el momento en que se lo dije estamos abrazados y cuando solté las palabras, se alejó de mí y se fue.-Aprieto los dientes con fuerza para no sollozar y agacho la cabeza.
-Lo siento, Cam. Ashton es un idiota por tratarte así.-Ella pone una mano en mi hombro y lo frota calidamente.
La verdad es que agradezco tener una buena amiga como Celia en este momento, para alegrarme en estos momentos.
Después de que ella acabará con su helado, ponemos rumbo a casa.
Cuando llegamos, Celia y yo pasamos a dentro. Se escuchan gritos y me estremezco al escucharlos, pues me duele la cabeza.
Cuando me paro en la puerta, observo a los 4 chicos frente a mí y al mirar a uno en particular, siento algo en mi estómago. Retiro tales sentimiento para alguien que no los merece y me quedo ahí observando.No sabía que mi hermano bebía, pero bueno, considero que es algo normal a sus 18 años. Los vasos llenos de cerveza, al ser golpeados resuenan por toda la habitación. Suspiro cuando veo que uno de los chicos que no conozco, vierte un poco de la sustancia en el sofá. No sé porque, creo que seré yo la que lo limpie.
Siento una mano en mi espalda y luego casi caigo de bruces contra el suelo. Todos se callan de pronto y después tengo todas las miradas sobre mí. Me sonrojo por hacer el ridículo delante de los amigos de mi hermano y fulmino a la causante de todo, con la mirada. Celia solo me ignora y se acerca a su novio y lo besa.
Luke la sienta sobre su regazo y me mira con una sonrisa.
-¿Cam, te unes?-Asiento con la cabeza y me siento en el sofá donde un rubio se encuentra sentado.
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El Amigo De Mi Hermano (Corrigiendo)
Teen Fiction-Luke, la próxima vez llevas más cuidado.-Le dije con severidad mientras me levantaba. Aseguré la toalla por si se movía y miré a mi hermano. Este no es Luke. -¿Que hay belleza?-Me dijo el intruso esbozando una sonrisa ladeada. El chico que tenía d...