El Amigo De Mi Hermano (Corrigiendo)

Capítulo 16

¡Hola a todos!

Ya he podido escribir, ¡por fin! Xd
Bueno, nos ponemos serios, este capítulo tenía que llegar y lo sabéis. Espero que os guste, como siempre

Graciias por el apoyo.

Atte: Lucy

Ashton.

Cuando mamá me vio con esas pintas su boca se abrió, casi cayendo al suelo. Corrió hacía mi y me abrazó. Me relaje en sus brazos, mama era de esas mujeres que lo daban todo por sus hijos, ya que papa pasaba poco tiempo en casa y apenas podíamos verlo. De ahí viene a que la casa de Luke parezca la mía. Siempre me iba a su casa, a jugar cuando eramos niños y/o a una fiesta. Mama se separo de mi y me examinó con sus ojos azules. ¿Azules? Si, saque los ojos de papa.

-Dime ahora mismo donde has estado y quien te ha hecho eso.-Entrecerró los ojos amenazadoramente.-Jovencito me temo que estas castigado.

-Mama, estuve en casa de Luke y esto nada mas que fue un rasguño.-Nos separamos por completo y unas cuantas miradas mas de cachorrito y me libre de uno de muchos castigos. Puedo decir que estoy mimado por ella.

Cuando me tire en mi cama y cruce mis brazos por detrás de mi cabeza, la imagen de Camila en pijama vino a mi cabeza. Nunca me había pasado, que al mirar a una chica miles de sentimientos me atravesaran. Ya no era lujuria, que también. Era algo que me recorría la espalda... cómo un escalofrío.

Negué con la cabeza, solo es una chica Ashton.

Y lo era. Pero una increíble. Una que te hacía replantearte miles de cosas que antes no tenían importancia, querer mostrarte lo mejor que puedas delante de ella...

Camila.

Paz y tranquilidad.

Se respiraba.

Y parece mentira que hace unas horas Ashton estuvo en esta casa, en esa habitación. Verlo en ese estado me mataba y me ponía mal, no poder ayudarlo cuando realmente él fue el me ayudó. Algún día podía recompensarle.

Suspire aburrida, cada día se hacía más malo aquí. Ya casi no sonreía y estaba más decaída que de costumbre.

De repente un pitido me sacó de mis pensamientos. Era el teléfono. Corrí a la salita de estar, donde estaba. Descolgue y me lo lleve al oído.

-¿Diga?

-¿Cam?

-Sí, ¿quién es?-Pregunté impaciente.

-Hija, ¿esque ya no te acuerdas de mí o qué?

-¿Papá? ¡Cómo estás! Tanto tiempo sin hablar contigo.-Me ilusione de repente.

-Estoy muy bien, cariño y tu también lo estarás cuando sepas que ¡Te vuelves conmigo a Londres!

Me quede muda.

-¿No te alegras, Cami?

No dije nada simplemente corté la llamada y caí derrotada al sofá. Las lágrimas se agolparon en mis ojos. ¿Acaso me estaba pidiendo que dejará mi nueva vida? ¿Y por qué reacciono así?

Claro, porque perderé el contacto con Luke, Celia, e incluso con mama. No podía, les hecharia de menos y mucho. Mi cabeza daba vueltas y pronto sentí las lágrimas caer por mis mejillas, como un río que llega al mar. Enterre mi cara en mis manos y solloce fuerte. Escuche pasos acercarse y unos brazos rodearme los hombros. Esa persona comenzó a susurrarme cosas y supe que era Luke. Él siempre tan comprensivo, y eso hizo que llorará más fuerte le abracé con ganas y me empezó a acariciar el pelo. Estuvimos así por un rato, después me separé de él y limpie mis lágrimas.