Capítulo 23

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Camila.

Me pongo un unos shorts vaqueros, una camisa negra y para completar coloco en mis pies mis vans favoritas. Hago una trenza de lado en mi pelo y aparte maquillo mi cara:
Brillo de labios y rimel.

Abajo Landon me espera y me regala una sonrisa al verme. Su pelo está más brillante que la otra vez y deduzco que es porque lleva gomina.

-¿Lista?-Dice.

-Sí.

Después de un viaje en el coche, en el que lo pasamos hablando acerca de mí. Porque Landon no paraba de preguntarme cosas y no me molestaba, todo lo contrario. Me alegra que alguien se interese por mí.

Aparca el coche en un descampado y cuando cierro la puerta, me deslumbra lo que veo.

La entrada del puente está formada por una pequeña torre de mármol, ligadas a las cuerdas de que sujetan la superficie del puente. A mitad, otro montículo de mármol. El agua del mar es azul cristalina y el ambiente, a pesar de haber muchos coches, es sensacional.

Sin prestar mucha atención a mi acompañante, e ignorando a los coches que apenas pasan a estas horas de la tarde. Camino hacía el borde del puente, me agarro a las cuerdas y asomo mi cabeza, observando el mar.

La brisa marina se hace notar enseguida y el olor a salitre también.

Noto unas manos en mi cintura y espero encontrarme a Ashton sonriendo y bromeando sobre el paisaje, pero para mi desilusión encuentro a Landon. Me sonríe y yo espero sentir algo... pero nada.

No siento esas mariposas, tampoco esa corriente eléctrica que me atraviesa cuando me toca Ashton.

No siento nada.

-¿Te gusta?-Quita sus manos de mi cadera.

Espero que no se haya dado cuenta de mi incomodez.

Le sonrío, y ambos caminamos por el borde del puente.

-Me encanta. Nunca había visto nada así.

-Me alegra que te guste. ¿Quieres tomar un helado?

-Vale.

Con un helado de vainilla en mis manos, nos sentamos en una explanada no muy lejos del puente.

-¿Te está gustando Miami? No es nada del otr....

Lo corto.

-Me está encantando. Es totalmente diferente a Londres.

-¿Eres inglesa?

Asiento.

-Apenas se nota. Aunque tu piel pálida, esos ojos...

-¿Qué le pasa a mis ojos?-Pregunto.

-Nada... son muy bonitos.-Ríe.

-Ah, ya me estaba preocupando.

Seguimos bromeando y hablando. Landon es un chico agradable y divertido, con el que se puede platicar cualquier cosa.

-Y dime... ¿nadie especial?

Lo miro de pronto y muerdo el interior de mi mejilla.

Abro la puerta del coche y me tomo un tiempo para responder.

-Bueno...

-Tengo mis sospechas.-Dice.

-¿Cuáles?-Cruzo los dedos mentalmente para que no acierte.

-Puede ser que el que te guste...-Arranca el coche y en menos de dos minutos estamos en la carretera- tenga ojos verdes y pelo negro.

-Aquí hay muchos chicos son así.-Espeto a la defensiva.

El Amigo De Mi Hermano (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora