El multiverso de FNAF 2

Pesadillas heredadas #4

(Esto se está alargando más de la cuenta, pero afortunadamente, este ya es el último capítulo :D)

Mary se acostó al lado de su hermanito, cerró los ojos, y dejó que Susie tocara levemente su cabeza con la mano izquierda. Mientras que con la derecha, tocaba la cabeza de Gerald

"Muy bien... Usaré mis poderes para conectar vuestras mentes. Vosotros solo dormiros, y vuestros sueños automáticamente se conectarán..."

Explicó la pelirrubia utilizando sus inexplicables habilidades para llevar a cabo el tratamiento. Eventualmente, los dos Schmidts quedaron completamente dormidos...

...

Al abrir los ojos nuevamente, Mary se percató de que ya no estaba en la habitación de su amiga. Sino que se encontraba en su propia casa... Bueno, su casa del pasado, de cuando ella era solo una niña. No se diferenciaba mucho de su hogar actual, pero habían ciertos detalles pequeños que podían ser destacados. De igual forma, eso no era lo importante...

"¡Aaaaaah!"

El grito de Gerald resonó por toda la casa, alcanzando todos y cada uno de los rincones de la estructura. Nada más escucharlo, la fémina se puso manos a la obra y corrió hacia la habitación del chico para defenderlo de sus pesadillas. Su cuerpo temblaba, pero ella no estaba nerviosa, sino decidida. Estaba decidida a confrontarlos, derrotar a aquel gato y a aquel ratón con tal de salvarle la vida a su querido principito. Ya los había vencido una vez, y podía volver a hacerlo...

"¡Gerald!"

Exclamó en voz alta cuando vio que la puerta de su cuarto estaba a tan solo unos metros de distancia. Ya estaba a punto de llegar... Cuando, de repente, algo la tomó por detrás y evitó que pudiera seguir corriendo

"Jajajajaja..."

Una tétrica risa salió de la boca del gato robótico, quién tomó a la castaña del cuello, y, con una fuerza sobrehumana, comenzó a ejercer presión para asfixiarla

"Agh... Cat... Vete a... La mierda..."

Determinada a ir con su hermanito para salvarlo, la chica consiguió fuerzas de Dios sabe dónde para liberarse de aquel agarre. Con un fuerte codazo en el abdomen, le causó el suficiente daño al animatrónico como para debilitarlo ligeramente. Acto seguido, se quitó la metálica mano de su cuello empleando ambas manos en el proceso. Ya era libre, y aprovechando cada segundo posible, corrió hacia la puerta para abrirla de una patada...

Había llegado en el momento adecuado. Ante ella, se encontraban Rat y Gerald. Este último siendo levantado por el ratón robótico. Pero antes de que pudiera matarlo, Mary lo embistió con todas sus fuerzas y le arrebató al niño de las manos con rapidez

"¡Mary! ¡Has venido!"

Exclamó el infante viendo con entusiasmo y emoción a su querida hermana mayor, que había llegado hasta ahí solo para protegerlo. Rat, furioso por la embestida sorpresa, trató de abalanzarse contra la chica para destrozarla con sus manos desnudas, pero ella fue más rápida que él y, con linterna en mano, iluminó su rostro con la intensa luz del aparato, aturdiendo al raton durante unos instantes, los cuales aprovechó para darle una buena patada en todo el abdomen. Finalmente, Rat cayó al suelo y Mary no dudó ni un momento en comenzar a darle patadas y linternazos para destruirlo por completo, y lo habría conseguido de no ser por la repentina aparición de Cat, que agarró a la chica del pelo y la levantó para estamparla fuertemente contra la pared. Seguido a eso, le dio un fuerte golpe en la cara que le rompió la nariz y la dejó directamente en el suelo. Con su cabeza dándole vueltas, el cuerpo de la Schmidt reaccionó por puro instinto de supervivencia e iluminó la cara del gato para aturdirlo. Gracias a eso, Mary consiguió salvarse de una "muerte" segura