•.𝐃𝐃𝐂.• | ¿Que tanta probabilidad hay de que el chico del que estuviste enamorada toda tu adolescencia, ahora sea tu vecino? O ¿Quizá haya algo más que eso?
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Nos despertamos temprano, María se metió a bañar, mientras que yo fui a la cocina a preparar algo de desayunar.
Quise sorprenderla, así que le hice unos hot cakes, a ella le fascina esa comida, hice solo unos cuantos para ella y para mi, los acompañe con un poco de fruta picada y un poco de chocolate caliente, ya que estaba haciendo un poco de frío.
A los minutos de ya haber tenido todo preparado, apenas iba a subir a nuestro cuarto, cuando ella ya venía, ya se había maquillado y todo eso que hacen las chicas.
- Cornelio: Buenos días, amor - le di un beso.
- María: Buenos días, corazón, ¿Cómo amaneciste? - preguntó.
- Cornelio: Bien, vaya que descanse después de toda la limpieza, ¿Tu que tal? - respondí.
- María: Igual, descanse muy bien, aunque quisiera quedarme más tiempo en cama -
- Cornelio: Podemos hacerlo -
- María: Lo sé, pero tengo que acompañar a Ashley con el gine y de ahí pasaré a la boutique -
- Cornelio: ¿Que te parece si primero vas con Ashley, regresas y de aquí nos vamos juntos a la boutique? - sugirió.
- María: Me parece perfecto -
- Cornelio: Bueno, vente vamos a desayunar, te hice hot cakes, tus favoritos - mostré.
- María: Que delicioso - sobó su pancita.
- Cornelio: Lo sé, me lo dices todos los días -
- María: Que vanidoso eres, ya ni tu mismo te soportas - rodé los ojos y sonreí mientras negaba.
Luego de unos minutos, mi chica ya se había ido, aproveché para irme a bañar, alistarme, pues queria ir a unas tiendas a comprar algunas cosas que ocupo.
Me puse algo sencillo, pues, quería andar cómodo, el clima ya se había calmado un poco, así que para el día fresco de hoy, solo me puse una chaqueta de mezclilla.
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Salí de la casa, me subí a la camioneta y tomé camino a una tienda que se especializa en vender cosas para la casa.
Cómo ya sería 14 de febrero y un mes más que estoy con María, quise sorprenderla con unos muebles que se que le sacará mucho provecho.
Y se los daré de una vez, porque nos iremos de viaje, entonces así para que antes de que nos vayamos, los tenga.
- Cornelio: Buen día, hermano -
- Vendedor: Buen día, ¿En qué le puedo ayudar? -
Le dije lo que quería exactamente, él me mostraba las cosas y ya yo escogía el que más le gustaría a María.
Luego de una hora, termine de escoger, pues estaba un poco indeciso pero se hizo.
- Vendedor: Nosotros lo llevaremos a su domicilio, solo es cuestión de que nos la de y ya aquí se hace la entrega -
- Cornelio: Perfecto - tome la hoja y comencé a escribir.
Después de ahí, me fui a una florería, pues quería sorprenderla aún más. Llegué, hice el pedido y en unos minutos ya tenían lo que había perdido.
Llegué a casa y justo iba llegando el camión que traía las cosas que había comprado, les ayude un poco y ya las pusimos donde las quería exactamente.
[...]
Se escuchó una camioneta, supuse que ya había llegó mi chica, salí y efectivamente estaba ella ahí.
- María: Hola, hola mi amor - se bajó y cerró la puerta.
- Cornelio: Hola amor, ¿Cómo le fue? - pregunté dándole un beso.
Nos adentramos a la casa.
- María: Bien, bebé está súper bien, muy chiquito aún pero todo está saliendo perfecto -
- Cornelio: ¿Ya podemos saber que tendrá? - estaba emocionado.
- María: No, el doctor dijo que hasta los 6 meses, y Ashley apenas tiene 3 -
- Cornelio: Ah cabron, ¿Que no en diciembre apenas se enteró? -
- María: Si, pero ahí ya tenía un mes de embarazo, más dos que ya pasaron, pues tres -
- Cornelio: Con este, ¿Ya cumpliría 4 meses? -
- María: Si, hay no, se me está haciendo que los días van volando - asentí.
- Cornelio: Amor, te tengo una sorpresa -
- María: ¿En serio? Muero por verla -
- Cornelio: Vayamos a nuestro cuarto -
Apenas íbamos a subir cuando le llega una llamada a María, pude ver cómo su expresión cambio de feliz a casi llorar, me asusté mucho.
- María: Amor, me tengo que ir - estaba llorando.
Estaba desesperada, tomo su bolso y apenas iba a salir cuando la tome del brazo.
- Cornelio: ¿A donde hay que ir? - pregunté serio.
- María: A la boutique, Cornelio, rápido -
Algo malo está sucediendo, si reacción es otro rollo, está llorando a mares, mientras manejaba angustiado, trataba de calmarla pero me era imposible.
Cuando llegamos al lugar, no pude creer lo que mis ojos estaban viendo.
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Lo siento bebés, capítulo corto, quizá más tarde les actualizo otro.
