•.𝐃𝐃𝐂.• | ¿Que tanta probabilidad hay de que el chico del que estuviste enamorada toda tu adolescencia, ahora sea tu vecino? O ¿Quizá haya algo más que eso?
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M A R A T Ó N 1 / 2
Pov's María: Nos levantamos temprano, pues queríamos hacer un leve recorrido aquí en Tulum, antes de irnos a casa.
Solo faltaba yo de terminar en alistarme, Hassan estaban en la cama, esperándome en eso le entró una llamada de su mamá, la saludos, estuvieron platicando un rato, termine de alistarme y a los minutos terminaron la llamada y salimos de la habitación, para dirigirnos al lobby y ahí esperar al chófer.
- Hassan: Mira, hay que ir por algo de comer, en lo que llega Mario - asentí y fuimos a la gran mesa de comida.
Mario, es el chófer, aunque si les soy sincera, él no se llama así, nosotros decidimos bautizarlo con ese nombre, en forma de amigos y él con gusto acepto.
Agarramos unas charolas que había ahí, tomamos algo de comida para ponerla en el recipiente, también nos tomamos el tiempo de servirle un platico a Mario, pues para que coma algo.
Ya teníamos nuestros platillos en la mano, eso eso llegó el chófer y nos subimos a la camioneta.
- Mario: Buenos días, chicos - dijo.
- Hassan: Buenos días Mario - respondió.
- María: Buenos días, señor Mario, mire nos tomamos la libertad de traerle este platillo de comida, para que coma junto con nosotros - le pedí a Hassan que se lo pasará.
- Mario: Muchas gracias señorita Juli, por este detalle - dijo.
Lo que es él, Gabito, y Hassan me dicen Juli, pero más los dos primeros.
Nos dijo que nos llevaría a comprar algo de beber, pues para así comer bien, para esto al llegar a la tienda nos bajamos nosotros, solo le preguntamos que cual bebida quería y ya nos dijo.
No tardamos ni diez minutos y ya estábamos arriba de la camioneta, ahora sí nos pusimos a comer, como buenos amigos que somos, de ahí le dijimos que se sumará a nuestra turisteada por Tulum y aceptó.
(...)
Luego de casi dos horas, estábamos en el hotel nuevamente, fuimos por nuestras cosas, pues ya era hora de irnos al aeropuerto, para ahora sí irnos a Obregón.
Siendo sincera, me la pase muy bien, aunque me hubiera gustado tener más días para disfrutar al cien pero ya otra oportunidad, tendremos.
Ya habíamos terminado de arreglar nuestras maletas y las subimos a la camioneta, claro, Mario nos ayudó en todo momento.
Ahora nos montamos a la camioneta y nos dirigimos al aeropuerto, nos despedimos de nuestro amigo.
Después de hacer el check-in, pudimos subirnos al avión, yo me puse de lado de la ventana, amo ese lugar, mientras que Hassan estaba a mi lado, y es que también es de que me pongo en se lugar porque me recargo para que Hassan pueda dormir en mis piernas.
