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Katsuki paso toda la noche como fiera enjaulada, sus amigos la pasaron también con ellos en su hogar, haber escuchado lo que Izuku vivió dejó un sabor amargo en todos.

Izuku estaba acostado llorando suavemente cuando sintió las manos de Katsuki rodearlo y su aroma cubrirlo con suavidad.

—Lamento todo lo que pasaste mi amor— susurro Katsuki apretando un poco a Izuku contra él— sé que ella estará orgullosa de lo que haces.

—Me hubiera encantado verla crecer, me hubieras aceptado en tu vida aún con una pequeña?— preguntó de pronto.

—Te hubiera aceptado en mi vida sin importar nada más— respondió con seguridad.

Izuku se removió entre sus brazos hasta lograr acomodarse para quedar de frente a él— Gracias kacchan— susurro Izuku buscando esconderse en el pecho del cenizo.

Katsuki no respondió, solo lo abrazo, Izuku era quien menos debería agradecer, le había dado todo sin escatimar. Izuku era quien merecía las gracias de Katsuki y aúnque lo dijera cada día por el resto de sus vidas sentía que jamás sería suficiente pues el pequeño peliverde entre sus brazos merecía más.

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Katsuki había salido al súper, habían dado dos días de descanso entre el segundo y el tercer día de juicio, más que nada por la condición de Izuku, los medicos y su abogado habían coincidido que relatar aquella vivencia pondría en riesgo al pequeño que crecía en su interior y al peliverde mismo.

Mientras caminaba por la plaza en dirección al súper un par de jóvenes se acercaron con timidez, Katsuki las miro con la ceja levantada, estaba acostumbrado a que la gente hiciera eso, era parte de las cosas que traían el ser el número uno

—Disculpe Dynamigth— hablo una de ellas, ambas omegas según distinguió Katsuki cuando estuvieron cerca, llevaban unas bolsas de regalo una rosa y otra amarilla

Hizo un gesto para anunciarles que las estaba escuchando, la chica tomo un respiro y estiró ambas bolsas.

—Salí con un alfa con el que concebí una pequeña y al igual que a su pareja me la arrebató de forma cruel, por favor acepte estos regalos para su Omega, se que es imprudente de mi parte pero se el dolor que está pasando y me gustaría que sintiera que no está solo. Iba a llevarlos al siguiente día de juicio pero por suerte lo vi— pidió la joven y Katsuki tomó los regalos sin saber cómo reaccionar— espero que sea muy feliz de ahora en adelante.

Después de eso las omegas se alejaron sin más, no quiso abrir las bolsas solo las llevo con él

Compro por lo que iba y cuando estaba en la caja el joven que estaba atendiendo lo miro por unos segundos antes de atreverse a decir algo más.

—¿Podría darle esto a tu pareja?— preguntó con timidez esperando una negativa, aún así le ofreció la cajita de chocolates— siempre dude de lo que el héroe dijo, sé que está pasando un mal momento por favor, hágale llegar esto.

De vuelta a casa encontró a Izuku sentado con Shinso a sus pies y la cabeza recargada en su rodilla y Uraraka peinando su cabello desde atrás del sofá.

Se acercó con cautela y suspiro, le contó lo que las omegas habían dicho, Izuku miro las bolsas y abrió primero la rosa, en ella había un hermoso peluche rosa y una pequeña dedicatoria.

"𝑇𝑢 𝑝𝑟𝑖𝑛𝑐𝑒𝑠𝑎 𝑦 𝑚𝑖 𝑝𝑟𝑖𝑛𝑐𝑒𝑠𝑎 𝑗𝑢𝑒𝑔𝑎𝑛 𝑗𝑢𝑛𝑡𝑎𝑠, 𝑠𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠 𝑑𝑖𝑓𝑖𝑐𝑖𝑙, 𝑝𝑒𝑟𝑜 𝑛𝑜 𝑒𝑠𝑡𝑎𝑠 𝑠𝑜𝑙𝑜, 𝑡𝑒 𝑎𝑏𝑟𝑎𝑧𝑜 𝑑𝑒𝑠𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑑𝑖𝑠𝑡𝑎𝑛𝑐𝑖𝑎 𝑦 𝑠𝑜𝑙𝑜 𝑟𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑎, 𝑛𝑜 𝑑𝑒𝑗𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑏𝑟𝑖𝑙𝑙𝑎𝑟, 𝑣𝑖𝑣𝑒 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑒𝑙𝑙𝑎, 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑐𝑢𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑠𝑒 𝑣𝑢𝑒𝑙𝑣𝑎𝑛 𝑎 𝑣𝑒𝑟 𝑙𝑒 𝑐𝑢𝑒𝑛𝑡𝑒𝑠 𝑡𝑜𝑑𝑜 𝑙𝑜 𝑞𝑢𝑒 ℎ𝑖𝑐𝑖𝑠𝑡𝑒, 𝑠𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑙𝑙𝑎 𝑠𝑒𝑟𝑎 𝑓𝑒𝑙𝑖𝑧 𝑐𝑜𝑛 𝑒𝑠𝑜"

Izuku abrazo el lindo osito, agradeció en silencio esa muestra de cariño, la siguiente bolsa contenía un mameluco amarillo suave y un peluche, era de dominio público la existencia de Keshi si que ese osito color cenizo era para él.

Recibió también de buena manera los chocolates.

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El tercer día al fin llegó, las puertas fueron abiertas y ante la mirada casi aterrada de Katsuki entró Suichi 

El alfa camino hasta la zona designada y se sentó ahí, era testigo llamado por los abogados de Keigo así que ellos comenzaran las preguntas.

—¿Conoces al señor Bakugo?— preguntó el abogado.

—Si, así es—respondio el alfa mirando en dirección de Katsuki.

—¿Qué relación tenías con él en la escuela secundaria?— pregunto nuevamente y Suichi miró una vez más a Katsuki y luego al abogado

—Katsuki y yo siempre hemos sido buenos amigos desde que nos conocimos en Aldera Junior, Kats formaba parte de ese grupo de alfas populares y con justa razón, con el quirk que tiene y su porte era obvio que se volvería popular— relato.

—Muchos decían que se los veía juntos todo el tiempo.— presionó el abogado

—Normal, éramos muy unidos. —respondió  con obviedad.

—¿Eran?— Suichi miro al abogado con fastidio en su rostro sabiendo que debía responder con cautela para que no tergiversaran sus palabras.

—Nos distanciamos cuando salimos de la escuela, él fue a la UA, yo a Shiketsu, nos volvimos a ver un poco más seguido cuando salimos de la escuela, aunque fue un breve tiempo también, yo fui a la universidad y él comenzó su carrera como héroe— respondió con seguridad.

—Si fue a Shiketsu conoció entonces al joven Midoriya no?—Señalo el abogado.

—Si, asistíamos al curso de soporte técnico, no fuimos amigos muy cercanos pero llegué a considerarlo una buena amistad, convivimos mucho, estuvimos en el mismo grupo, tengo buenos recuerdos con él, honestamente me sorprendió cuando me enteré que mis dos amigos habían quedado juntos, creo que hacen buena pareja.— relato Suichi.

Suichi en efecto estimaba a Izuku, recordaba al pequeño Omega que temblaba cuando un alfa se acercaba pero todo ese miedo se perdía cuando comenzaba a hablar sobre héroes, un verdadero genio, siempre lo admiro por su capacidad, no fue sorpresa cuando se enteró que Izuku trabajaba para Shield, lo que sí le sorprendió fue verlo siendo defendido por Katsuki.

Podría decir que como alfa fue una mierda en su relación pues engañar a Katsuki no era algo que lo que se llenará de orgullo, también acepto que la culpa fue de ambos, no supieron ser pareja y el mayor error lo cometió él al haberlo marcado y luego romper el lazo, pero eso era algo de ellos, no destruiría más la vida de la persona que una vez amó ni mucho menos de un cachorro que era su sangre.

—Miren, se que los rumores de Katsuki siendo Omega se regaron cómo agua, pero llevo una vida conociéndolo y puedo decir con seguridad que Katsuki nunca encajaría en ese término, es un alfa y ese de ahí lastimó al Omega de mi amigo de una forma tan cruel, no hay disculpa que valga para un hecho tan grande como ese, pero al menos debería tener el valor de reconocer su error y recibir su merecido, se supone que los alfas debemos cuidar de los omegas, no lastimarlos, y muchas veces eso es lo primero que olvidamos, no diré nada en contra del héroe número uno ni de Izuku a quien admiro realmente, así que si sus preguntas son con intenciones de que diga algo que ese pajarraco pueda tomar a favor suyo entonces no tengo más que decir— dijo el alfa con seriedad antes de mirar a Katsuki en una pequeña conversación silenciosa.—Lamento mucho que estés pasando esto Kats, y realmente lo siento, no merecen nada de esto.

Quizá el trasfondo de ese "lo siento" fue de mayor peso para Katsuki que solo sonrió de lado a Suichi y asintió, Izuku entendió que Kacchan al fin se había liberado por completo  de su pasado como Omega, y agradeció en silencio a Suichi por haber hablado de esa forma.

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—Izuku?— el peliverde se giro viendo al pelinegro, Suichi avanzó hasta él— puedo hablar un momento contigo?

Lazos (BkDk) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora