Lealtad

23. Batalla

Draco, Ginny y Harry corrían a través del pasadizo, mientras se alejaban de la casa se dieron cuenta que no todos los gritos y las explosiones que se escuchaban venían de Hogwarts, si no también de Hogsmeade. Lupin había ido en esa dirección pero una vez fuera de la protección de la casa se había desaparecido para ir a buscar sus refuerzos.

Salieron a trompicones debajo del sauce boxeador y siguieron corriendo hacia el castillo, ya no les importaba ocultarse tenían que actuar con rapidez.

Un destello verde iluminó el cielo sobre la torre de Astronomía, cuando se disipó pudieron ver la marca tenebrosa entre las nubes.

Draco grito de dolor y se detuvo sosteniendose el brazo izquierdo, aún en la oscuridad pudieron ver cómo de su mano escurría sangre. Sin contemplaciones Harry lo tomo de la túnica y lo obligó a correr, para resguardarse bajo un altillo del castillo.

—¡Dame tu brazo! ¡Rápido! —le dijo jalandolo para poder descubrir la marca —. "Infarate".

Una especie de gelatina transparente cubrió su brazo como un brazalete deteniendo el sangrado. Draco sintió alivio de inmediato.

—¿Qué hiciste?

—Solo la cubrí con gel coagulante, es algo que los muggles hacían y pensé que ayudaría en tu caso, mantendrá el dolor a raya también. Pero no sé por cuánto tiempo, es la primera vez que lo pruebo en una herida de verdad.

—Tu... ¿Creaste el hechizo?

—Si, empecé a probar despues de la otra vez. Pero no importa ahora. Avísame si el efecto se acaba. Hay que hacer planes.

Ginny quien solo los miraba intercambio una rápida mirada con Draco, incluso los magos adultos y experimentados tenían problemas al crear hechizos nuevos y Harry lo había hecho ver cómo si no hubiera sido nada, sobre todo al ser un hechizo sanador.

—¿Creen que Dumbledore haya salido? -pregunto Ginny y antes de obtener una respuesta ordenó: - ¡Dame el mapa!

Harry se lo paso y lo abrió con rapidez, los tres comenzaron a buscar, algunos nombres conocidos resaltaron: profesores, miembros de la orden como Tonks y Bill Weasley, aurores y mortifagos como el hombre lobo Greyback, los hermanos Carrow, Crabbe y Goyle, Gibbon, Rowle y Yaxley acompañados del Sr. Nott.

No pudieron encontrar a Dumbledore, Ron o Hermione por ningún lado.

—Parece que han salido, o al menos no están en el despacho de Dumbledore. Debemos apurarnos - dijo Harry después de volver a plegar el mapa.

—Aun no sabemos cómo entrar.

—Estuve pensando y talvez podríamos adivinar la contraseña. A Dumbledore le gustan los dulces solo es cuestión de probar.

—¿Y si no lo logramos? -pregunto Ginny.

—Improvisamos. ¿Cuál fue la última contraseña que le dió a Luna?

—"Panquecitos de calabaza"

—Vale, evitemos esa por el momento. Podría desencadenar una alarma o algo. Vamos, les pondré un desiluminador, la capa solo nos estorbaría por el momento.

Después de dejarse hacer hechizo los tres se pusieron en marcha, dentro del castillo todo era un caos, parecía que Lupin aún no regresaba con sus refuerzos pero no por eso faltaba gente que protegiera el castillo. Harry había tenido razón en suponer que Dumbledore no dejaría a sus alumnos desprotegidos.

Atravesaron pasillos y escaleras sin que al parecer alguien notará su presencia. La mayoría de los alumnos estaban resguardados en sus salas comunes y solo unos cuantos de séptimo y sexto ayudaban a los adultos. Les había parecido ver a Luna, Neville, Dean y Seamus entre ellos, pero debido a la rapidez con la que se estaban moviendo no estaban seguros. Harry los detuvo justo antes de llegar al despacho.