Bastian
— ¿Qué tal fue todo? - pregunta Adam.
Me subo al auto luego de haberme despedido de Jane.
— Fue grandioso y algo nostálgico. - le comento
— ¿Por qué?
— Ya sabes. - suelto un gran suspiro antes de continuar. - Recordé algunos momentos que pasamos.
— Sabía que sería una mala idea.
Noto que aprieta el volante y puedo entender su enojo.
— Pero valió la pena. - le aseguro rápidamente. - Valió cada segundo.
Una sonrisa se forma en mis labios al recordar lo que pasé hace unas horas.
— Nunca entenderé esa conexión que tuvieron ustedes dos. - una sonrisa triste se le forma en el rostro. - pero me siento afortunado de haber estado durante esos años junto a ustedes.
Aquellos años que por nada del mundo podrán volver.
— Habla de algo, Adam.
Si seguimos con el mismo tema arruinará la noche que tuve con Jane.
— Está bien. - accede. - Mañana tendré una cita con Jazmine.
— La llevarás al campo ¿Cierto?
— Así es, señor juez. - ahora se encuentra animado. - Y ya tengo muchas ideas para tener temas de conversación.
— No tengas temas de conversación preparados, solo se trata de fluir y ser tu mismo.
— Decirlo para ti es fácil. - me pone mala cara. - Yo no tengo tu experiencia.
Justo toca ese botón que hace que me endurezca un poco, pero me controlo por no querer arruinar mi noche.
Así que le pongo una mala cara y se da cuenta de que no me gustó para nada lo que dijo.— Ok. Ok. - se disculpa al ver mi expresión. - No lo quise decir de esa manera. Lo lamento.
Es un poco hablador, por eso a veces se mete en algunos problemas en la escuela.
— Le hablaré sobre las estrellas y cantare Hakuna Matata. - confiesa con una gran sonrisa.
— Adam, tus dos anteriores citas fueron un desastre por cantar eso. - se lo recuerdo.
— Tú lo ves como un desastre, yo lo veo como que no eran las indicadas para mí.
Al menos le ve el lado positivo. Tan típico de él
— Espero que esta vez no termines igual de triste. - bromeo.
— Creo que esta vez sí es la correcta. - dice seriamente. - Esta chica tiene algo que hace que no salga de mi mente.
— Estás imaginando un futuro con hijos como mascotas y una gran casa ¿Cierto?
— Estás en lo correcto. - sonríe alegremente.
— Siempre tú tan soñador. - niego con la cabeza.
— Atrevete a soñar un poco, Bast. - me reclama - La vida se trata de soñar.
— Quizá luego. - zanjo la conversación.
— Creo que ya estás soñando, puedo ver a Jane en tus ojos. - comenta riéndose.
Llego a casa y encuentro a mi madre dormida en el sofá, de seguro estaba esperando.
Le doy un beso en la frente y la cobijo con la manta que tiene caída a sus pies.Procede a ir a mi habitación, pero antes de poner un pie en la escalera escucho que abren la puerta principal, me giro sobre mis talones y veo que se trata nada más y nada menos que de mi padre. Llega con su traje y su maletín de trabajo, cosa que se me hace muy extraña ya que la primera vez que llega a esta hora.
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Nunca es tarde (En Proceso)
Romance"Nunca es tarde para hacer todo lo que queremos". Es la frase que me inculcaron desde pequeño, pero no tuve la fortaleza mental de ponerlo en práctica. Sin embargo, todo eso cambio cuando llegó ella.