2.2. A.J.

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[ Narrador omnisciente ]

Thomas se encontraba en la sala de centro de control, donde todos los documentos y proyectos estaban ahí. No tenían permitido el acceso, pero Thomas sabía como tenía que entrar.

En cuanto escuchó la puerta principal abrirse, se limpió con las manos las lágrimas que resbalaban por sus mejillas. Intentó no hacerse notar, esperaba que nadie entrara en ese momento.

—¿Thomas? —el nombrado esperó que realmente fuera Maxine o Newt la persona que había entrado a la habitación—. Tom, ¿estás aquí? He visto como te has ido del Comedor, quería ver si estabas bien.

Thomas estaba apoyado contra una de las paredes de la sala, las piernas flexionadas contra su pecho, las manos rodeando estas.

—Estoy bien. —Fue todo lo que Thomas dejó escuchar.

La persona que había entrado a la sala paró justo al cruzar una de las esquinas y verlo sentado en el suelo.

Su expresión de confusión y sorpresa lo dijeron todo. Thomas giró la cabeza y lo vio parado a un lado, de pie. Este se acercó hasta Thomas y se arrodilló frente a él, mirándolo preocupado.

—¿Qué ha pasado? —preguntó, pero Thomas se intentó levantar para irse—. Thomas —lo detuvo, manteniéndolo en su sitio.

—No...

—Dime que ha pasado. ¿Te han hecho algo?

—Nadie me ha hecho nada. Estoy bien, Aris. —Respondió casi de inmediato, negando con la cabeza.

—Ya, dime eso hasta que me lo crea. Tienes los ojos rojos.

—Estoy bien. He discutido con Maxine y con Newt, pero ya está. Supongo que me afectó más de la cuenta. —Miró hacia abajo, recordando lo ocurrido hace unos minutos.

—Vale, ¿puedo... saber que era lo que pasaba? —Aris preguntó, mirando a su alrededor por un momento por si alguien entraba a la sala.

Thomas levantó la cabeza y lo miró. Aris frunció el ceño ante aquella mirada, sus ojos llorosos.

—Por ti, Aris. Estábamos discutiendo por ti. —Aris se alejó un poco de Thomas, confundido.

—¿Qué? —fue lo que pudo articular.

—Siempre pasa cuando estás cerca de mi.

Su brazalete vibró en su muñeca. Bajó la mirada a este, viendo el nombre de Newt en la pantalla, un texto escrito en este:

"Janson sabe dónde estás. Van a matar a Aris si no huyes de allí."

Thomas miró a Aris de inmediato, quien frunció el ceño. No dijo nada y se levantó, atrapando el brazo del mayor y arrastrándolo por toda la habitación hasta llegar a la puerta principal.

—¿Qué es lo que pasa? —Aris hablaba entre quejidos por el agarre de Thomas.

—Tenemos que irnos. Tenías razón, no podemos estar aquí —Thomas dijo, abriendo la puerta con su huella—. Newt me acaba de avisar sobre Janson.

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