En el café, Tomás y yo empezamos a hablar, mientras Lucía se tomaba su café; parecía una niña chiquita.—Entonces, ¿te gusta Joshua? —dijo con una mirada pícara y una sonrisa.
—No le gusta, le encanta —interrumpió Lucía.
—Bueno, ¿ustedes dos están en mi contra o qué? No digan tonterías, ¡nos odiamos! —dije enojada.
—Vamos, Alice, te brillan los ojos cuando mencionan su nombre —dijo Lucía riendo.
—¡Claro que no, Lucía! ¿Estás loca o alucinando?
—Sí, amas a Jones y se ve que él a ti. Acéptalo —dijeron Tomás y Lucía riendo.
—A ver, ¿y ustedes de dónde sacan que me gusta o le gustó?
—¿Has visto cómo se puso cuando te vio conmigo? ¿Cómo te mira? ¿Cómo se pone cuando hablamos? ¡Niña ciega! —dijo Tomás.
—Seguramente no me estaba mirando a mí.
—Vale, como digas, enana.
Terminamos de tomar el café. Lucía se quedó mirándonos, observando el chisme, y Tomás nos llevó a mi casa.
—Chao, Tomi. Nos vemos mañana, ¿vale?
—Chau, princesa y chismosa —rió refiriéndose a Lucía.
Me quedé pensando en lo que hablé con Tomás y Lucía; tienen algo de razón. Me gusta todo de Joshua, pero lo odio demasiado. Es un idiota, pero sus lindos ojos cafés, su cabello negro ondulado... ¿Qué estoy pensando? Es una estupidez pensar en él.
Ese día Lucía y yo hicimos una pijamada. Compramos dulces y pusimos Harry Potter. Nos acostamos algo tarde y hablamos de lo que sucedió ese día.
—Luci, ¿tú en serio crees que él no sé… guste de mí? —le pregunté mientras comía gomitas.
—¿En serio, Alice? Tú no te das cuenta de nada, ¿verdad? —dijo mirándome mal.
—¿Por qué lo dices? —hice pucheros.
—Dios, Alice, él pasa siempre por la biblioteca para verte. Pero tú lo ignoras. Él fue el que nos dijo que ustedes dos deberían estar juntos en pareja en el viaje. Te mira con celos cada vez que estás con Tomás. ¿No te parece suficiente?
La verdad es que no lo había pensado así; Jones siempre me trataba mal y era cortante.
—Claro, no lo había considerado así.
—Vamos a dormir, Alice. No lo sobrepienses, ¿sí?
Acepté y nos acostamos a dormir. Me era muy difícil no pensar en lo que me habían dicho y en que quizá sí tenían razón.
ESTÁS LEYENDO
𝓔𝓵 𝓲𝓷𝓿𝓲𝓮𝓻𝓷𝓸 𝓔𝓽𝓮𝓻𝓷𝓸
Romance¿𝙹ó𝚟𝚎𝚗𝚎𝚜 𝚍𝚎 𝚙𝚛𝚎𝚙𝚊𝚛𝚊𝚝𝚘𝚛𝚒𝚊 𝚎𝚖𝚙𝚛𝚎𝚗𝚍𝚒𝚎𝚗𝚍𝚘 𝚞𝚗𝚊 𝚊𝚟𝚎𝚗𝚝𝚞𝚛𝚊? ¿𝚄𝚗 𝚎𝚗𝚊𝚖𝚘𝚛𝚊𝚖𝚒𝚎𝚗𝚝𝚘 𝚜𝚎𝚌𝚛𝚎𝚝𝚘? ¿𝙾 𝚚𝚞𝚒𝚣á𝚜... 𝚊𝚕𝚐𝚘 𝚖á𝚜? Joshua Jones, estudiante universitario, 21 años de edad, ¿un idiota? A...