-¿Qué hubiera pasado si Mahidevran se ganaba el amor de Süleyman? ¿Qué tal si se convertía en la mujer más poderosa de Estamul?
Todo esto sucede gracias a Carol, una joven de 15 años, que está obsesionada con el Imperio Otomano, más específicamente...
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Después de la siestas, Mahidevran se levantó más tranquila y con menos dolor. Se acercó a su hijo; Abdullah.
Beso su rostro y luego se levantó para alimentar a Mihrimah, la pequeña no como aún, y la nodriza no llega, entonces, Mahidevran amamanato a la bebé y sonrió.
—Mi dulce niña. Espero que te encuentres bien.
Enseguida llegó Gülsag con el pequeño.
—Gülsag, la madre sultana debe querer ver a Mustafa. Prepara lo, haré dormir a Mihrimah e iré con él.
La mujer hizo una reverencia y empezó a cambiar al niño.
Mahidevran salio junto a él y fueron a los aposentos de la Valide.
El pequeño estaba muy contento por pasar tiempo con su abuela. Aunque la llegada de Hatice también fue muy buena.
La madre le pidió a Mahidevran que se fuera, pero Hatice la contradijo, y continuó diciendo que el sultán quiere que todos se enteren.
—El sultán, anulo mi compromiso con Mehmed shalovi. A partir de hoy ya no soy su prometida.
—¿Esas fueron las órdenes del sultán?
—Sí, su majestad. También dijo, que debe comenzar los preparativos para la boda.
—¿Qué boda? ¿El compromiso no fue anulado?
—La boda entre Ibrahim y yo. El sultán aprobó nuestro matrimonio.
—Felicitaciones, sultana. Serán muy felices.—Dijo Mahidevran tomando las manos de Hatice.
Luego de esto el pequeño Mustafa preguntó si Ibrahim regreso y ella dijo que sí. Pero la madre sultana no está nada contenta con la idea.
—Mahidevran ¿como están los niños?
—Mmh, muy bien, sultana. Pero me temo que necesito una nodriza cuanto antes.
—¿Por qué? ¿Acaso no puedes alimentarlos?
—Mi sultana, puedo alimentar a Ahmed y a Kösem, pero a ka sultana Mihrimah no. Tal vez no tenga suficiente alimento para ella.
—Tranquila, no es necesario que alimentes a Mihrimah. Ya tienes dos bebés que amamantar.
Mahidevran solo sonrió y se sentó junto a la madre sultana, viendo como Hatice se molestaba un poco.
Al anochecer, Mahidevran fue de vuelta a sus aposentos, pensando en la pobre de Ayşe. La muchacha todavía no mejoraba.
Y eso era molesto, pero no sabía que Gülsag vio algo.
Mientras ella hablaba con Azra y mecía a Mustafa llegó nerviosa.
La mujer al ver su preocupación, cargo a Mustafa y lo puso en la cama, lo acomodo y luego se sentó allí.
De paso, cargo a Kösem y luego preguntó lo sucedido a Gülsag.
